A través de un comunicado de prensa la Fiscalía Regional del Biobío informó que pospondrá la entrega del cuerpo de Tomás Bravo, el niño de tres años que falleció en circunstancias que todavía se investigan luego de estar desaparecido durante nueve días en la ciudad de Lebu.
El Ministerio Público detalló que se está “avanzando en el desarrollo de múltiples diligencias instruidas a los equipos policiales, cuyos resultados se esperan en el más breve plazo posible”. Esto debido a que la causa de muerte de Tomás todavía se mantiene como indeterminada y sigue en estudio por parte del Servicio Médico Legal (SML).
El único imputado hasta ahora en la causa, el tío abuelo del niño, Jorge Escobar Escobar, fue dejado en libertad por la Corte de Apelaciones de Concepción. La decisión del tribunal de alzada penquista se tomó el jueves en la audiencia de apelación a la medida cautelar de prisión preventiva solicitada por el Ministerio Público. En el fallo, los ministros concluyeron que hasta el momento no existe ninguna prueba científica que acredite la participación del imputado en el homicidio y, además, criticaron “la falta de rigurosidad” en la indagatoria que lidera la fiscal regional Marcela Cartagena.
La fiscalía además comunicó que se está trabajando junto al SML en el esclarecimiento de la causa y circunstancias en que falleció el niño: “En esta tarea, se está a la espera de numerosas conclusiones forenses. Asimismo, para la consecución de este objetivo, se contará con análisis de peritos extranjeros”.
En esa misma línea, la Fiscalía Regional del Biobío agregó que “debido a lo anterior, resulta indispensable posponer la entrega del cuerpo del niño a su familia”. Según lo informado, los padres de Tomás —Estefanía Gutiérrez y Moisés Bravo— ya estarían en conocimiento de la decisión y “han comprendido la necesidad de esperar para recibir a su hijo”.
La fiscal Cartagena determinó además “declarar el secreto de algunas piezas de la indagatoria”, con el fin de resguardar los antecedentes. Además, la institución comunicó que la causa y el equipo de investigación se incorporaron a la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Regional del Biobío.