El Centro de Día del Adulto Mayor se creó con el propósito de entregarles distintas herramientas a los ancianos de la comuna, a través de talleres y profesionales, y con la intención de estimular sus capacidades físicas y cognitivas. La encargada de la entidad, Paola Aravena, es enfática en precisar que "no es una guardería de adultos mayores, no es que tú vengas y tu papá va a ser cuidado acá, tu papá va a ser estimulado acá".
Por su parte, la jefa del Departamento de Coordinación Programática del Centro de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Las Condes, Daniela Peñaloza, explica que esta es una manera de poder retrasar los niveles de dependencia y mantener al adulto mayor permanentemente activo para que llegue a estadios de adultez más avanzados.
"Si hoy día viene un adulto de 60, 65 o 70 años, que están con niveles de autonomía física o cognitiva, y son parte de nuestros talleres, desde el punto de vista de la salud, lo que estamos haciendo nosotros con ellos es que cuando ya entran a los 80, 85 años, van a estar en mejores condiciones", indicó.
Esta iniciativa, que es pionera en nuestro país, se ha ido difundiendo cada vez más entre los vecinos de la comuna, quienes, en un principio, según menciona Peñaloza, se confundían y pensaban que esto era "una especie de residencia". Por el contrario, este es un espacio de "sociabilización, de amistad, de conversación, de compartir, de adquirir vínculos con sus pares y formar lazos con los profesores", dice, agregando que como institución "ofrecemos espacios para que ellos puedan mantener su vidas lo más normal posible, que puedan abarcar todos los aspectos que te definen como persona".
En el lugar trabajan alrededor de 21 profesionales cuyas intervenciones están orientadas tanto a la salud física como a la salud mental con un enfoque psicoterapéutico y psicosocial.
El Centro de Día cuenta con kinesiólogos, fonoaudiólogos, sicólogos, terapeutas ocupacionales, enfermeras, nutricionistas, asistentes sociales y profesores de arte, música y canto, quienes no solo atienden en el recinto, sino que además realizan visitas domiciliarias para aquellos adultos mayores que frecuentan permanentemente el lugar y por alguna razón no puedan asistir.
"El espacio de intervención no depende solamente de que el vecino pueda venir; si ya es usuario nuestro, si ya tenemos un historial con él y sabemos que tiene una necesidad de que nosotros vayamos a la casa, realizamos visitas domiciliarias y acompañamos el proceso sin dejarlo de lado", señala Peñaloza.
Uno de los atractivos que brinda el Centro de Día son las bajas tarifas que deben pagar aquellas personas que asisten. La jornada completa tiene un valor de $ 5 mil, la media jornada cuesta $ 2.500 y el servicio de alimentación se obtiene por un monto de $ 2 mil.
En el caso de que alguna persona no tuviese el dinero necesario para cubrir el valor diario, el establecimiento brinda subvenciones que van desde el 50% al 100% del copago.
La fidelización de los usuarios es otro punto que destaca Peñaloza, quien argumenta que esto se debe a que los adultos mayores "se encuentran en un ambiente amigable, protegido, sano", y las razones por la cuales estos dejan de asistir se deben a que "caen en situaciones de salud que les impiden seguir con esta rutina diaria en el Centro de Día, porque fallecen, porque la familia decide llevarlos a una residencia o porque se cambian de comuna".
El Centro también recibe gente con demencia, previamente diagnosticada por algún médico, y lo que se busca con estas personas es estimular sus habilidades remanentes; esto porque, según manifiesta Peñaloza, muchos ya vienen con "disminución de memoria, desorientación temporoespacial, etc.". Por lo tanto, se les brinda los mismos servicios que a cualquier anciano autovalente, con los mismos talleres y con los mismos profesionales.
Un informe realizado el año 2018 por el Centro de Día indicó que "alrededor de un 70% de las personas con demencia mantiene o mejora sus capacidades". Aravena también señala que "alrededor de un 85% de las familias perciben que ha habido una mejora en la interacción social de los ancianos".
"También tenemos referencia de la familia y la gran mayoría dice que hablan mucho más que cuando no venían al Centro de Día, entonces te das cuenta que hay capacidades y hay circuitos que estaban dormidos, que solamente necesitaban ser estimulados", añade.
Aravena comenta que ha recibido visitas de diversas comunas que buscan replicar esta iniciativa, y anticipa que en Ñuñoa pronto se inaugurará un Centro de Día. Menciona que incluso han venido de otros países a ver la experiencia, gente de Colombia, Ecuador y España. Con respecto a este último país, precisa que "encuentran que es maravilloso porque es verdad, es más maravilloso que los de España, podríamos decir".
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), los adultos mayores superan los 2 millones 800 mil personas, lo que equivale al 16,2% de la población total del país. El estudio constata, además, que el 16,5% de ellos supera los 80 años, lo que pone en el tapete la urgente necesidad de adoptar políticas públicas dirigidas a la nueva realidad que representa ese segmento.
