Hombres y mujeres, viejos, jóvenes e incluso un niño. Todos integran la lista de las casi mil víctimas fatales por coronavirus registradas en el país. Y es que a casi tres meses del primer caso, las cifras no son alentadoras, particularmente en la Región Metropolitana.
Si entre el 3 de marzo y el 15 de mayo la capital sumaba un poco más de 30 mil contagios, desde el inicio de la cuarentena total, el 16 de mayo pasado, sumó otros 45 mil casos en apenas dos semanas.
El patrón observable en el aumento de contagios se ha reflejado también en las muertes. A las 246 víctimas que contaba la RM hasta mediados de este mes, se han sumado otros 482 fallecidos durante el período de confinamiento total. Las razones, coinciden los expertos, son variadas.
Para el epidemiólogo de la Universidad de Chile Gabriel Cavada, “no cabe ninguna duda de que la estrategia de las cuarentenas selectivas fracasó. Y de esta cuarentena total tenemos que esperar pocos resultados”, advierte, a propósito de la poca capacidad para poder cumplir la medida en sectores más vulnerables por factores de hacinamiento.
Cavada adelanta que la nueva definición de “caso probable” (es decir, pacientes con síntomas y un contacto estrecho de un confirmado como positivo) que entró en vigencia hoy debió haberse puesto en marcha semanas atrás, pero que ayuda a tener el panorama más fidedigno de letalidad del virus. “Los muertos que se contabilizan hasta ahora son los confirmados con PCR. Era una proporción con respecto a los positivos. Ahora el sujeto grave, con caso probable, va a aumentar esa curva. Cuando hablamos del aumento en el conteo con esa categoría, de manera inmediata lo asociamos a más muertos en la misma proporción”, explica.
El epidemiólogo estima que la curva de contagios deberá rectificarse y, en consecuencia, también el cálculo de la letalidad. Este tema está actualmente siendo revisado por la Contraloría, que analiza la discordancia de los números entregados por el Minsal y el Registro Civil. “La Contraloría, lo más probable, es que se va a hacer asesorar por el gremio médico y lo que le van a sugerir es que todos los muertos, al menos desde el 15 de abril en adelante que tengan causa respiratoria, tenemos que cambiarlos por causa segura a Covid-19. Desde esa fecha, más menos, no circula otra cosa que no sea coronavirus”, señala Cavada.
Cúmulo de casos graves
La infectóloga Jeannette Dabanch pone la señal de peligro para las próximas semanas. El peak de contagios del lunes pasado -con 4.895 PCR positivos- traerá consecuencias para la red hospitalaria la semana entrante.
Durante la conversación, la médica insiste en la palabra “prudencia”. Y es que aunque exista una aparente estabilización en los contagios informados en los cuatro mil, “hay una latencia en el número de pacientes que vamos detectando. No hay ningún laboratorio que no tenga exámenes en fila”.
La demanda sobre la red, con una ocupación casi del 100% en la RM según el reporte de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, debiera agudizar la letalidad registrada hasta ahora, según Dabanch. “Esta variable va a ir en aumento, porque estamos hospitalizando cada vez a más y a más enfermos. Estamos con el 97% de las camas UCI ocupadas y con todo el personal trabajando al máximo, pero también agotado y asustado. Lamentablemente, el número de fallecidos va a ir creciendo”, concluye.
Nueva estrategia
La epidemióloga María Teresa Valenzuela, quien también es parte del Consejo Asesor Covid-19, concuerda con la teoría de Dabanch. “El mayor número de casos confirmados lo tuvimos hace casi una semana, y ellos son quienes van a generar demanda hospitalaria”, recalca.
Para la doctora, el déficit ha estado en el incumplimiento de las cuarentenas y en el correcto aislamiento. La estrategia comunicacional del Ministerio de Salud, afirma, debe girar hacia la máxima difusión de las residencias sanitarias. “Hemos tenido una explosión de casos por la cantidad de contactos intradomiciliarios, por no moverse a residencias sanitarias”, revela.
En tanto, en el reporte oficial de hoy, el ministro Jaime Mañalich y la subsecretaria Paula Daza también informaron que la cifra de nuevos contagios en la última jornada fue de 4.220. De ellos, 3.736 presentan síntomas, mientras que 484 son asintomáticos.
Con este balance, el total de contagios confirmados desde el inicio de la pandemia asciende a 94.858. Los decesos, en tanto, se elevaron a 997, con 53 reportados hoy, la segunda cifra más alta desde el inicio de la pandemia.
“Esta enfermedad no nos ha dado tregua”, lamentó la subsecretaria Daza.
