Ibe García tiene 23 años. Se encuentra en Chile desde octubre de 2017 y es uno de los 1.345 venezolanos que solicitaron refugio durante ese año. "Me detectaron una enfermedad a la columna. En Venezuela nunca conseguí el medicamento ni pude acudir a él en las farmacias, porque no era del partido político chavista. Mi salud estaba muy afectada y el médico me recomendó que me fuera del país, como todos los jóvenes, porque si me quedaba terminaría en la cama y finalmente moriría", explicó García, quien obtuvo la documentación chilena tras su petición de refugio.
Según cifras obtenidas por La Tercera, vía Ley de Transparencia, entre 2015 y 2017 Chile ha experimentado un crecimiento de 799% en estas solicitudes. Mientras en 2015 se levantaron 629 peticiones de refugio, en 2017 ese número alcanzó las 5.656, promediando 15 requerimientos por día. No obstante, los números hasta el 28 de febrero de 2018 revelan que la tendencia continúa en alza, dado que en estos dos meses las solicitudes ya alcanzaron las 2.229.
De acuerdo a la legislación nacional, refugiados son "quienes por fundados temores de ser perseguidos por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas se encuentren fuera del país de su nacionalidad y no puedan o no quieran acogerse a la protección de aquel debido a dichos temores". A esta definición se suman, además, aquellos que hayan huido de su país por motivos de "violencia generalizada, agresión extranjera, conflictos internos y la violación masiva a los DD.HH. u otras".
La solicitud de asilo se formaliza en el Departamento de Extranjería y Migración (DEM), entidad que otorga una visa temporaria por ocho meses, la cual permite trabajar y obtener la cédula de identidad chilena. Esta puede ser renovada hasta que una Comisión de Reconocimiento -liderada por el jefe del DEM y cuatro representantes del Ministerio del Interior y Cancillería- tome una decisión final sobre la petición de refugio.
Situación de Colombia
Históricamente, ciudadanos colombianos han sido los que han realizado estas solicitudes en mayor número, argumentando las situaciones de violencia que se viven en su país de origen. De hecho, según las estadísticas de la Agencia ONU para Refugiados (Acnur) de diciembre de 2016, Colombia se encuentra entre las 20 naciones de origen con mayor cantidad de peticiones de refugio a nivel mundial.
A partir de 2017, no obstante, se exhibe un drástico crecimiento de peticiones desde Cuba y Venezuela. De hecho, en lo que va de 2018, las solicitudes provenientes de esas dos naciones superan por primera vez los números de Colombia. Como ejemplo, en 2015, 17 cubanos y 14 venezolanos pidieron refugio a Chile, en comparación a 490 colombianos. En 2017, estos últimos ingresaron 2.516 requerimientos, Cuba 1.603 y Venezuela 1.345. Hasta febrero de 2018, la isla caribeña lidera con 1.522 solicitudes, seguida por Venezuela, con 385, y Colombia, con 285.
"Respecto de los casos de cubanos y venezolanos, debe tenerse en cuenta que las solicitudes de ambas nacionalidades han aumentado de manera exponencial en los últimos años", indicó Álvaro Bellolio, jefe del DEM.
En el caso puntual de estos países, hasta la fecha solo se han otorgado siete refugios, cuatro para Cuba y tres para Venezuela. "Respecto de las solicitudes cubanas, destacan en el último tiempo mayores rechazos, pues se ha tratado de casos particulares en que las personas invocaban motivos económicos para salir de su país hacia Chile, no teniendo en cuenta los requisitos legales para ser considerados refugiados", explicó Bellolio.
El dirigente de la Coordinadora Nacional de Inmigrantes, Rodolfo Noriega, señaló que los cubanos "no son propiamente refugiados, sino inmigrantes que no tienen la posibilidad de ingresar a Chile, porque les exigen un visado especial".
En relación a los venezolanos, Bellolio indicó que hay numerosos casos en análisis, "ya habiéndose entrevistado a los interesados". Noriega, por su parte, dijo que "esto se debe a la compleja situación política que se vive en ese país".