No cuestionó la decisión judicial en contra de quien lo seguía en antigüedad en la institución, pero subrayó que no puede "prejuzgar" mientras los tribunales no emitan una sentencia.
De esa manera, el comandante en jefe del Ejército, general Ricardo Martínez, comenzó a explicar hoy, en el Congreso, la motivación que lo llevó a visitar la noche del martes al renunciado general John Griffths, quien quedó privado de libertad en el Regimiento de Policía Militar de Peñalolén, luego de ser notificado del proceso en su contra por parte de la ministra de la Corte Marcial, Romy Rutherford.
"Lo fui a ver como un camarada más que conozco desde hace 40 años, y en los momentos difíciles también hay que estar al lado, no como el comandante en jefe, sino como un camarada de armas", expresó la máxima autoridad del Ejército.
El alto oficial efectuó estas declaraciones tras un encuentro con el ministro de Defensa, Alberto Espina, en la subcomisión especial de presupuestos del Parlamento. Añadió que "teniendo muy en cuenta mi cargo, lo fui a ver cuando me iba a la casa; denme ese espacio para tener una solidaridad humana con una persona que lo está pasando mal".
El jefe del Ejército señaló también que en la conversación con el general (R) Griffiths "me expresó la convicción personal de que no había incurrido en ningún delito y no tengo porqué prejuzgar, mientras los tribunales no hayan llegado a un veredicto final. Yo, la verdad, lo conozco desde hace 40 años, y quiero pensar que todo está perfectamente válido. ¿Por qué tengo que dudar de una expresión personal?". Sobre esa idea, destacó que el general Griffiths "ha tenido una carrera muy destacada, brillante, y como a todo chileno le cabe la presunción de inocencia".
Reacciones
Respecto de la visita efectuada por Martínez, el senador Pedro Araya (Ind), presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara Alta, señaló que "el comandante en jefe del Ejército debe cuidar las formas, para evitar alguna suspicacia sobre el apoyo explicito a un funcionario procesado por la justicia".
El senador RN Kenneth Pugh (RN) dijo que "el general debe conducir a todos sus hombres y mujeres. Lo que ocurrió es algo natural. Chile tiene un estado de derecho, no es intervención, sino un lado humano. Yo no veo ningún problema".