Comisión para la Paz inicia trabajo, acuerda ronda de reuniones y Francisco Arellano liderará el Plan Buen Vivir

Entre las 8:30 y las 13:30. Cinco horas duró la primera reunión de la Comisión por la Paz y el Entendimiento, la que acordó volver a encontrarse todos los jueves hasta terminar sus funciones a fines de 2024. La instancia fue anunciada por el Presidente Gabriel Boric el 11 de noviembre de 2022, quien ese día afirmó que tenía por finalidad saldar la demanda de tierras de las comunidades mapuche.

La comisión iniciaría sus funciones en marzo de 2023, lo que no ocurrió, pues el lanzamiento se dio finalmente en junio. La tabla de la primera sesión contempló unas primeras palabras de bienvenida del ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde, ya que el espacio está radicado en su ministerio. Tras esto el integrante del comité político abandonó la sesión y hubo un espacio para que cada uno de los ocho comisionados hiciera comentarios respecto de sus diagnósticos.

La cita fue dirigida por los presidentes de la instancia, el exministro de Sebastián Piñera, Alfredo Moreno, y el senador de la DC, Francisco Huenchumilla. Ambos serán los cabezas de serie de la comisión, una labor que les encargó el propio Presidente Boric en persona. Además, la comisión está conformada por Carmen Gloria Aravena (REP), Sebastián Naveillán, Adolfo Millabur, Emilia Nuyado (PS), Juan Pablo Leonelli y Gloria Callupe. Todos comparten un grupo de coordinación en WhatsApp que fue creado por el secretario ejecutivo de la comisión, Víctor Ramos (CS), exjefe de gabinete del diputado y presidente de Convergencia, Diego Ibáñez.

Cada uno de ellos podrá contratar a un experto que los asesore, los que serían anunciados la próxima semana. En noviembre se propuso entregar un primer informe que se entregará en noviembre. Algunas de las jornadas de trabajo se llevarán a cabo en el Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos.

El reglamento fue uno de los puntos que quedaron pendientes. Desde el Ejecutivo se les entregó a los comisionados un borrador -al que accedió La Tercera- que incluía que en la toma de decisiones de la comisión se “procurará llegar a acuerdos por la unanimidad de sus miembros. En caso de que no fuere posible arribar a un consenso, las decisiones se tomarán por mayoría simple de los asistentes a la respectiva sesión”. A esto se opusieron los presentes, quienes optaron porque el consenso de todos los comisionados sea la forma para decidir.

Otra actividad que tendrán en la próxima sesión es la recepción de la ministra de Bienes Nacionales, Javiera Toro, y al presidente de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi), Luis Penchuleo. Para la sesión subsiguiente se contempla la presencia de los representantes de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) y del Servicio de Impuestos Internos (SII). Además, se está trabajando en una página web, que también se lanzaría en unos días, en donde la ciudadanía podría solicitar audiencias públicas.

Una de las decisiones que se tomó desde el Ejecutivo fue que Víctor Ramos se enfocara netamente en su rol como secretario técnico de la Comisión por la Paz y el Entendimiento. Esto generó un vacío en la dirección del Plan Buen Vivir, espacio que lideraba el exjefe de gabinete de Diego Ibáñez. Por esto, la próxima semana la Segpres va a oficializar que Francisco Arellano (Comunes) pasará a encabezar el Plan Buen Vivir.

Arellano trabajó codo a codo con Ramos en la búsqueda de nombres para la Comisión para la Paz y hoy se encuentra subrogando en el cargo que asumirá oficialmente en unos días. Este jueves estuvo en la reunión de cinco horas, junto a otros asesores del equipo de Estudios de la Segpres.

El personero del Frente Amplio es también uno de los liderazgos internos más fuertes que tiene Comunes. Fue uno de los amigos más cercanos del Presidente Boric en sus inicios en política. Se conocen desde la universidad, en donde se convirtió en su mano derecha en la FECH.

Cuando Boric llegó al Congreso, Arellano fue su jefe de gabinete entre 2014 y 2016. Dejó de ser su asesor más influyente luego de un quiebre en Izquierda Autónoma, espacio que ambos compartían. El entonces parlamentario apostó por un formalizar un partido (Movimiento Autonomista), mientras que el ahora encargado del Plan Buen Vivir apuntó a seguir ligados a los movimientos sociales y pasó a integrar el centro de estudios Nodo XXI, encabezado por Carlos Ruiz. En 2018 ambos se perdonaron.