“El hecho histórico que acabamos de aprobar no hubiese sido posible sin la indispensable voluntad y férrea iniciativa de quienes hoy integran el Concejo Municipal. Reconozco en las concejalas que votaron a favor este importante impulso por la memoria, los DD.HH. y la democracia”.
Esas fueron las palabras de la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, luego que este miércoles el Concejo Municipal de la comuna aprobara el cambio de nombre de nueve calles, un puente y dos plazoletas, iniciativa propuesta por la jefa comunal, en el marco de la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado.
La propuesta fue aprobada por el Concejo Comunal de la Sociedad Civil (COSOC) de la Municipalidad de Santiago y fue ratificada este miércoles por el Concejo Municipal, que aprobó la medida planteada por la jefa comunal por nueve votos a favor -incluyendo el voto de la alcaldesa- y dos en contra.
La antesala de la votación estuvo marcada por el descontento de algunos residentes de los sectores afectados por el cambio de nombre en sus calles.
Esta mañana, de hecho, vecinos de la calle Namur -que originalmente figuraba en la lista de calles a cambiar, pero que finalmente mantendrá su nombre- se movilizaron y protestaron en contra de rebautizar un tramo de calle como Ida Amelia Vera Almarza, quien fuera arquitecta y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y detenida el 19 de noviembre de 1974, permaneciendo desaparecida desde entonces.
Finalmente, el conflicto se zanjó y el Colegio de Arquitectos retrotrajo su decisión y, en cambio, apostó por modificar el nombre de la plazoleta ubicada en calle Merced con Monjitas por el de la militante del MIR, “como un recordatorio de su vida y de las trágicas circunstancias de su detención y posterior desaparición”.
La medida también tuvo manifestaciones de adherentes. Mientras se efectuaba el Concejo Municipal distintas organizaciones y personas particulares se reunieron en el frontis de la Municipalidad de Santiago, en apoyo a la decisión de rebautizar calles, en homenaje a detenidos desaparecidos tras el Golpe de Estado.
En el Concejo Municipal, previo a la votación, la alcaldesa Hassler aclaró que el rebautizo de las calles “no tendrá costos económicos asociados para los vecinos de la comuna”. Asimismo, manifestó que “este momento reviste un carácter histórico de discusión y por eso ha causado mucho interés en nuestro país y comuna”.
En esa línea, explicó que “el Comité de Conmemoración de los 50 años ha hecho un gran trabajo y que busca que este año sea un momento de memoria y de recuerdo para generar garantías de no repetición a la violación de los DD.HH., las personas que han sido mencionadas (nombres de calles) representan anhelos de cambio y nos recuerdan que nunca más en Chile ningún sector político puede pretender usar la fuerza para atentar contra la democracia”.
“Quiero agradecer a quienes han hecho posible llegar hasta este momento”, expresó la jefa comunal.
En la discusión de la medida, los diferentes miembros del Concejo expresaron sus posturas ante la propuesta. En ese escenario, la concejala Rosario Carvajal (Independiente), emocionada, expresó que la medida permitirá “recordarlos en calles, puentes y plazoletas es un acto de reparación, en un país donde la verdad y la justicia fue esquiva, donde se impusieron los pactos de silencio”.
“Estos actos promueven la no repetición, un ejercicio de memoria necesario para reflexionar y renovar nuestro compromiso por la democracia y el respeto a la diferencia, que el reconocimiento de estos espacios en la comuna de Santiago sean siempre espacios de encuentro, donde la vida se impone a la muerte”, señaló.
Por su parte, la concejala Paola Melo (PS), también por la afirmativa, señaló que “hoy asistimos a reconocer la historia y aportar en su memoria”.
Entre quienes se manifestaron en contra de la iniciativa, se encuentra el concejal Santiago Mekis (RN). en sus argumentos, manifestó que para él es “importante una consulta ciudadana en cada zona donde se cambiaron los nombres de las calles, porque mañana la política puede cambiar para el otro lado y pueden ser ocho concejales de derecha y cambiar de nuevo de nombre las calles, entonces yo creo que es importante consultarle a los vecinos, a las organizaciones y ver qué es lo que dicen”.
El concejal Juan Mena (Independiente), también criticó la iniciativa, señalando que “es una falta de respeto el no habérseles consultado a los vecinos afectados por este cambio de nombre sobre su parecer y sobre su consentimiento a realizar esta labor”. Además, advirtió que si en la próxima administración vuelve a formar parte del Concejo Municipal “me comprometo a volver a retomar los nombres que al día de hoy tienen estas calles”.