Los contagios de coronavirus han caído rápidamente en el país. Si el 2 de junio se promediaron 7.221 casos diarios, un mes después cayeron a 3.619, es decir, una baja del 49,8%.

En las Unidades de Cuidado Intensivo este cambio ha ido más lento, pero ya se nota: del peak de 3.302 pacientes graves que se alcanzó el 16 de junio, el viernes el gobierno informó 2.943 pacientes internados en esta área.

Con estas cifras, ¿estamos saliendo de la fase más crítica, hasta ahora, de la pandemia? Distintos expertos coinciden en que sí. Desde sus respectivas áreas urgenciólogos, intensivistas e infectólogos señalan que el virus está en una desescalada, que el país está entrando en una etapa de control de la epidemia y prevén que, gracias a las vacunas, los contagios se mantengan en niveles moderados durante todo el invierno, tendiendo a un mayor descenso hacia la primavera, cuando toda la población susceptible -solo los menores de 12 años están pendientes- haya sido inmunizada.

Pero advierten, eso sí, que un elemento podría descompensar lo ganado hasta ahora: la acción de nuevas variantes, en particular la delta, por lo que enfatizan en mantener el cierre de las fronteras.

Leonardo Ristori, jefe de la Urgencia de Clínica Indisa

18 Mayo 2020 Entrevista a Leonardo Ristori, médico jefe de Urgencia de la Clínica Indisa. Coronavirus Covid 19 Foto : Andrés Pérez

“Mirando lo que pasa en mi servicio y las cifras del Minsal, la verdad es que estamos en una baja de contagios. Ahora, yo no puedo asegurar que no sea una pausa y que no tengamos un alza nuevamente por las nuevas variantes del virus que están apareciendo”, dice Leonardo Ristori, jefe de la urgencia de Clínica Indisa.

Ristori explica que la caída en los contagios ha impactado en la disminución de los pacientes que se hospitalizan, lo que ha pemitido planificar el cierre de algunas unidades destinadas exclusivamente a pacientes Covid-19, producto de la emergencia, para restablecer su normal funcionamiento.

“Sin duda está influyendo la vacunación, pero no sabemos cuánto durará la inmunidad”, acota el urgenciólogo, quien también ha notado un aumento en la hospitalización de pacientes mayores de 60 años: “Yo creo que esto está mostrando que la dosis de refuerzo va a ser necesaria y ojalá se vacune alrededor de septiembre”.

Una amenaza que visualiza en el horizonte es el efecto de variantes y que estas puedan evadir la respuesta inmune. Por eso, enfatiza, “es importante mantener un cierre de frontera muy eficaz y una alta trazabilidad de casos, para garantizar que la gente se confine adecuadamente”,

Luis Castillo, jefe de la Unidad de Paciente Crítico del Hospital Barros Luco y coordinador Minsal de camas críticas

El jefe del Centro de Pacientes Críticos del Hospital Barros Luco y coordinador de camas críticas del Minsal, Luis Castillo, afirma que la situación “está mucho más controlada en términos de contagios y casos activos. Los casos que llegan a las UCI se han reducido en forma significativa. En los últimos días se han registrado ingresos netos negativos, y en la medida en que se han ido aumentando y cumpliendo las metas de vacunación, han ido en descenso los casos de pacientes ventilados”.

Para Castillo, la pandemia se encuentra en camino a un “mejor control” y a una “estabilización”. En ese escenario y considerando los complejos meses que ha enfrentado el personal sanitario, detalla que “hemos dado autorización para que, en forma progresiva, puedan hacer uso de sus feriados y días administrativos, para que puedan descansar. Ellos han hecho un despliegue muy grande para atender a los pacientes con mucho esfuerzo y gran calidad”.

El aumento en la hospitalización de adultos mayores que se ha registrado en las últimas semanas -y que ha encendido los temores respecto de una eventual pérdida de efectividad del esquema de inmunizaciones-, corresponde para el intensivista al porcentaje que, según los estudios, no logra una buena respuesta inmune pese a las vacunas y que, en el caso de CoronaVac, llega al 14% de las personas inyectadas. También lo atribuye al fenómeno de inmunosenescencia, la pérdida natural de inmunidad en las personas de edad más avanzada.

“No hay vacuna que proteja al 100%, y con mayor razón creo que las autoridades deben propender a una tercera dosis a la brevedad posible. Hay que tomar una decisión, y personalmente creo que lo mejor es vacunar con un mecanismo de acción distinto para estimular la inmunidad celular”. Lo que viene para los próximos meses, asegura Castillo, son cifras relativamente estabilizadas y a la baja. Eso sí, llama a estar atentos con la acción de variantes y mantener una muy estricta secuenciación de los casos positivos.

Jorge Ibáñez, jefe de la Urgencia de la Posta Central

El mandamás de la unidad de Urgencia del Hospital de Urgencia Asistencia Pública (o ex-Posta Central), señala que en términos numéricos y de pacientes hospitalizados, la baja reportada por el Minsal coincide con el escenario clínico que han visto a diario en la última semana.

“La consulta respiratoria se ha mantenido estable, pero son pacientes que no requieren ni siquiera hospitalización. Y otros con un soporte mínimo, terapia de oxígeno en diferentes modalidades, pero no ventilación mecánica. Esa es la tendencia que se ha venido dando”, detalla Jorge Ibáñez. Sin embargo, señala que con las aperturas y salidas de cuarentena, tienden a aumentar los cuadros no relacionados a Covid, como traumas, hemorragias digestivas, infartos o pacientes crónicos agravados.

¿Por qué se estaría dando este fenómeno de los casos a la baja, en pleno invierno, donde los cuadros respiratorios empeoran? “Sencillamente por la vacunación, no tiene otra explicación”, asegura el doctor. “La vacunación, de acuerdo a la literatura en medios internacionales, estudios proyectivos en relación a pacientes vacunados y la protección que están dando las vacunas, tiene absolutamente relación con esta baja”.

Quienes se han vacunado con la CoronaVac, cuenta, tienen una posibilidad mucho menor de caer a ventilación mecánica, pero no así para prevenir el contagio. Y muchas veces, los pacientes vacunados tienen sintomatología respiratoria que consultan, pero de menor gravedad.

Sobre qué tan estable es la caída de los casos, Ibáñez proyecta que “vamos a tener oscilaciones que tienen que ver con las cuarentenas dinámicas hasta septiembre, y de ahí, con cambio de estación y perfil epidemiológico de los otros virus que circulen, podremos ir avanzando a la disminución de los casos, junto con el aumento sostenido de la vacunación”. De todos modos el facultativo cree que será necesaria una tercera dosis de refuerzo, principalmente en grupos más vulnerables al virus.

Inia Pérez, jefa de Infectología de Clínica Alemana

En la práctica clínica, la doctora Pérez confirma que “efectivamente estamos con cifras auspiciosas, una caída importante de los casos. En la UCI ese reflejo se va a demorar un poco: hay que recordar que los pacientes hospitalizados son de hace dos semanas. Sin embargo, ya hemos visto disminución de hospitalizados y consultas. Estamos recién empezando a ver el reflejo de estos mejores números y aún no ha pasado la ola, pero necesitamos que la población nos siga ayudando para que esta se convierta en una baja sostenida”.

Sin embargo, explica que es probable que el virus se mantenga por largo tiempo circulando en el país, al igual que otros virus como el de la influenza o los resfríos habituales de invierno.

“No es que el virus sea menos infeccioso o mortal, sino que tiende a volverse endémico en vez de ser pandémico. Porque cuando es pandémico, tenemos una población expuesta muy grande y todos pueden enfermar. Cuando pasa a ser endémico, pasa a ser parte de los virus circulantes habituales, como la influenza, que sabemos que estacionalmente en invierno vuelve”.

Así, manifiesta Pérez, la vacuna evita que existan más personas susceptibles ante la infección grave. “Evitamos la exposición en base a vacunas, que es lo que estamos tratando de hacer con este virus. El número importante de vacunados nos ha estado ayudando, que más que evitar contagio o infección, sí está haciendo que los casos sean menos graves”, comenta.

“No sabemos cuál va a ser su comportamiento final con los años, puede que termine siendo un virus como el de la influenza y ante posibilidad de mutaciones, tengamos que revacunar constantemente. En la medida que tenemos menos circulación viral, tenemos menos posibilidad que se reproduzca. Mientras mejor controlemos la circulación viral, menos chances que al multiplicarse produzca mutaciones”, concluye.

Jeannette Dabanch, infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile

Si bien Jeannette Dabanch reconoce que hay un descenso, lo que actualmente le preocupa son los nuevos linajes que surgen del Covid-19. “El virus, hasta ahora, lo que hace es contagiarse, multiplicarse y genera nuevas versiones de sí mismo. Estas son las nuevas variantes que nos han sorprendido en el último tiempo muchísimo más rápido. Casi en paralelo han aparecido las variantes de UK, Sudáfrica, gamma y ahora delta, delta plus y epsilon”.

Asimismo, la infectóloga cree que debe elevarse la vigilancia epidemiológica tanto en Chile como a nivel de los países vecinos. “Depende de la capacidad de los países que puedan generar información respecto a los cambios del virus. Hay que tener una estrategia de vigilancia epidemiológica con centros donde podamos derivar las muestras de forma adecuada al laboratorio. Entonces, hay muchas variables en juego. El punto más importante es no darle ventaja al virus, reducir el contagio y hoy quienes son potencialmente capaces de darle ventaja al virus, es decir, todos quienes están infectados, son muchos”.

Aunque los casos han ido a la baja, Dabanch es cautelosa con respecto a la evolución del virus.

“No sé si va a llegar el momento en que el virus mute a formas menos nocivas. No me gusta llamarlo ‘mala persona’, porque dudo que tenga la conciencia. Lo que sí, el virus va buscando un reservorio adecuado para reproducirse. Mientras logramos encontrar las vacunas que nos ayuden, antivirales, hay que bloquear al virus y evitar que se siga multiplicando”, sostiene.

Catterina Ferreccio, epidemióloga U. Católica y parte del Consejo Asesor Covid-19

“El deseo que tenemos a nivel mundial es que esta variante sea la última y que el virus se diera cuenta que para sobrevivir no tiene que agravarnos y que mute a formas más ‘benignas’, pero esto simplemente pasa, el virus no piensa”, explica la epidemióloga de la Universidad Católica, Catterina Ferreccio.

El problema, detalla, es que “como hay tanta multiplicación del virus en el resto del mundo, sigue mutando y generando variantes. Cuando una de esas mutaciones le funciona y empieza a prevalecer frente a los otros, aumenta su predominancia. Y el humano, además, sigue moviéndose por el mundo y llevando al virus de un lado para otro”.

¿Las noticias más recientes y de preocupación para el mundo científico? “Epsilon, que yo la veo peor que la delta, porque en EE.UU. se han descrito nuevas mutaciones para esa variante que evaden la respuesta de vacunas de ARN mensajero, que hasta ahora han sido efectivas para controlar la transmisión”.

Sobre la situación nacional, Ferreccio indica que “acá en Chile estamos en un momento superbueno, con un R efectivo bajo 1. Los pacientes infectados en las últimas semanas, muchos de ellos, no infectaron a otra persona. Cuando estamos bajo esa cifra es porque le estamos ganando al virus. Pero como eso nos ha pasado antes también, hay que tener cautela. Por ejemplo, ya sabemos que la P.1 nos provocó el brote que se inició en verano y fue muy tarde cuando se cerró la frontera en abril”.