A dos semanas de las graves inundaciones causadas por el "invierno boliviano" que afectaron a las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, y Antofagasta, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) había catastrado hasta ahora un 47% de las viviendas que presentaron algún tipo de daño.

Las cifras muestra que el 82% de las estructuras ya revisadas presentan algún tipo de daño, aunque solo 11 (1%) no son reparables. Los propietarios del restante 99% (933 casas) recibirán el Subsidio de Reparación de Banco de Materiales. Este tipo de ayuda, centrada en autogestión, surgió luego del terremoto del 27F, y consiste en la entrega a cada afectado de una gift card cargada con montos que van en relación con el grado de daño sufrido por la vivienda.

"Una vez que está listo el catastro, se entrega la tarjeta a la persona, que puede adquirir con ella los materiales que necesita en una ferretería que forme parte del convenio respectivo", explicó el ministro (s) de vivienda, Guillermo Rolando.

Así, quienes habitan una vivienda con daños catalogados como leves (610, en el caso del norte) o moderados (262) reciben una tarjeta con hasta 120 UF (más de $ 3,5 millones). Cuando el daño es mayor (61 casos), el monto cargado sube a 300 UF (más de $ 8 millones).

Si los trabajos exigen algún grado de asistencia técnica, agrega la autoridad, el subsidio contempla los recursos para contratar los servicios de reparación. "Al contar con los materiales necesarios se acelera mucho el proceso de reconstrucción", explica Rolando.

La encargada nacional de Reconstrucción del Minvu, Bernardita Paul, agrega que este subsidio "tiene un beneficio colateral, ya que reactiva la economía local al generar ventas en las ferreterías locales".