Este 19 de octubre se cumplen 23 años desde la desaparición de Ricardo Harex González, joven estudiante de Liceo Salesiano San José de Punta Arenas cuyo caso aún no logra ser resuelto por la justicia.
A más de dos décadas de la desaparición, este viernes la ministra en visita para causas por violaciones a los derechos humanos y presidenta de la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, Inés Recart Parra, anunció que existen nuevas indagatorias que podrían aportar a dilucidar qué sucedió con el adolescente magallánico.
Según consignó la ministra, los antecedentes recientes aparecieron luego que la defensa de los padres del joven solicitara la toma de declaración a un nuevo testigo.
Los datos obtenidos tras la toma de declaración coincidieron con la presencia de la Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones (PDI) en Punta Arenas , quienes “se abocaron por una semana al estudio de este antecedente”.
Según comentó la ministra, estas nuevas diligencias arrojaron una hipótesis que antes no había sido investigada y que daría luces del paso del estudiante desaparecido por un sector de la ciudad que no había sido periciado.
“Teníamos situado a Ricardo hasta cierta zona de la ciudad de Punta Arenas, y esta nueva diligencia lo posiciona en un lugar distinto”, reveló la ministra.
“Lo que estamos haciendo es un estudio de aquella zona que requiere tecnología especializada para poder saber si en aquel trayecto algo sucedió con Ricardo Harex, que no sabemos qué puede ser, toda vez que todo está en el campo hipotético”, agregó.
Asimismo, anunció la facilitación de tecnologías por parte de la PDI para “hacer más precisas y menos invasivas estas diligencias que, evidentemente son secretas, ya que divulgar cualquier otro antecedente podría interferir en un resultado positivo que es el que esperamos se dé”.
Qué se sabe del caso
Ricardo Harex fue visto por última vez la noche del 19 de octubre de 2001. Ese día se despidió de sus padres para ir a un cumpleaños con sus compañeros de Liceo Salesiano San José, en el sector de Playa Norte de Punta Arenas.
Sus compañeros fueron los últimos en saber de él, cuando se retiró del cumpleaños para pasar a comprar algo para comer en un minimarket de camino a su casa.
Según testigos, cerca del lugar de su desaparición se vio a Rimsky Rojas, sacerdote y director del colegio donde estudiaba Ricardo, quien posteriormente se volvió uno de los sospechosos del caso.
Sin embargo, debido a la falta de antecedentes con el paso de los años, la causa terminó por ser archivada.
En 2011 el caso fue reabierto, luego de que se reportara el hallazgo de restos óseos en un sector de la ciudad.
Asimismo, a los pocos días del descubrimiento, el sacerdote Rimsky Rojas se suicidó debido a una profunda depresión.
Cada ciertos años el caso ha vuelto a los medios por la aparición de nuevas artistas en la investigación e incluso, en enero de este año se estrenó una temporada de la serie La Cacería inspirada en su historia, sin embargo, hasta ahora, continúa inconcluso.