Una investigación conjunta entre la PDI y Gendarmería, dirigida por el Ministerio Público, permitió desbaratar dos organizaciones delictuales y detener a 14 personas que se dedicaban a ingresar drogas y elementos prohibidos al interior del Centro Penitenciario Llancahue de Valdivia.
Tras cinco meses de investigación, se logró establecer la orgánica de funcionamiento de estas dos organizaciones, las cuales, con un completo sistema y roles dentro de la actividad, proveían a reclusos de todo tipo de sustancias ilícitas, alimentos, tecnología y productos, incluso comida rápida.
“A través de reuniones continuas de coordinación con Gendarmería de Chile, se tomó conocimiento de la existencia de una problemática en el perímetro de la cárcel de Valdivia, donde distintos sujetos estaban ingresando diferentes elementos a través de lanzamientos hacia el interior, parte de los cuales se trataba de drogas”, indicó el prefecto Inspector Leopoldo Bascuñán Gómez, jefe de la PDI Los Ríos.
Agregó que la investigación policial “permitió determinar que estábamos en presencia de dos estructuras criminales, con asiento acá en la ciudad de Valdivia, que se dedicaban a recibir diferentes remesas de drogas desde el norte del país, la cual acopiaban, abultaban, las dosificaban y posteriormente procedían a reclutar diferentes personas que laboraban como lanzadores”.
El sistema de las bandas
Todo comenzaba cuando una de las imputadas, residente de la ciudad de Rancagua, adquiría microteléfonos en el extranjero, los cuales enviaba hasta Valdivia mediante encomienda. Estos eran recibidos por otros integrantes de la organización, quienes acopiaban y mantenían el stock de estos elementos, los que ponían a disposición de los reclusos, siendo parte de paquetes que, junto a sustancias ilícitas, diversos alimentos y otros elementos, lanzaban al interior de la cárcel por valores desde los $ 50 mil hacia arriba.
Ya al interior del penal comenzaban a operar los “pescadores”, internos que utilizaban un sistema artesanal similar a una red para recoger estos lanzamientos y posteriormente entregarlos a sus destinatarios, generando un lucrativo negocio ilícito al interior del recinto.
Es por ello que una operación denominada “Monasterio”, detectives de la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado de Valdivia realizaron la entrada y registro en 9 domicilios de la ciudad de Valdivia y uno en la ciudad de Rancagua, donde funcionaban las organizaciones, deteniendo a un total de 14 imputados -8 mujeres y 6 hombres- por el hecho. En la ocasión, se incautaron 10 kilos 830 gramos de distintas drogas entre clorhidrato de cocaína, cocaína base y cannabis, 149 comprimidos de clonazepam, 697 mil pesos en dinero en efectivo, 20 microcelulares y 36 celulares smartphone, además de elementos asociados a la actividad ilícita.
Por su parte, Gendarmería realizó allanamiento en 21 celdas al interior de la cárcel, incautando droga, armas cortopunzantes, 19 teléfonos celulares, accesorios como tarjetas sim, memorias SD, cargadores, pendrive y elementos utilizados en el ingreso de elementos prohibidos al recinto, como las denominadas “arañas” con las cuales capturaban los paquetes que lanzaban al interior de los patios de los módulos, identificando a 21 internos vinculados a esta organización criminal.
Los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía de Valdivia.