Un amplio despliegue de Carabineros y una central móvil del Sapu en las afueras de la oficina del Departamento de Extranjería, ubicada en San Antonio 580, dieron cuenta de la masiva presencia de migrantes que llegaron en busca de información, tras el anuncio de un proceso de regularización anunciado la semana pasada por el gobierno.
Según precisaron a La Tercera funcionarios de esa oficina, la desinformación generó que casi se triplicara la concurrencia que, habitualmente, fluctúa entre 1.200 y 1.700 personas por día. Sin embargo, hoy a las 14 horas, ya se había atendido a 3.200 usuarios y aún faltaban mil números más para asignar.
Ani Landazuri tiene 23 años, es colombiana y lleva seis meses en el país. Ella es una de los tantos extranjeros que llegó hasta el lugar para tener más información: "Tengo mi visa de trabajo en trámite, pero aún no me responden. Vengo porque la información es muy enredada y mi idea es tener todo al día para no quedar ilegal, ni sufrir las consecuencias de esta nueva política migratoria".
Regularización
A pesar de que aún falta una semana para el inicio del proceso de regularización para aquellos extranjeros que no tengan sus papeles al día, muchos llegaron pensando que hoy comenzaba dicho trámite. Sin embargo, la autoridad recordó que parte el 23 de abril (próximo lunes) y ofrecerá un plazo de 90 días para quienes ingresaron legalmente, mientras que para aquellos que lo hicieron de manera irregular, solo se extenderá por 30 días.
Tal como explica el exdirector de la Fundación Fre, José María del Pino, "hemos fallado como país porque no hemos utilizado los mejores canales para poder entregar la información. Pero lo que debe quedar claro es que el proceso de regularización es para todos los migrantes que están en Chile y en la medida que hayan tenido una conducta irreprochable".
La venezolana Yenith Secao fue otra de las personas que llegó hasta Extranjería en busca de respuestas. En su caso, ingresó a Chile el 10 de abril, por lo que queda fuera del proceso extraordinario de regularización. Es decir, si ella quisiera extender su permanencia más allá de los 90 días que le ofrece su condición de turista, tendrá que volver a su país para solicitar un visa de permanencia temporal que le permita optar a contratos laborales.