En prisión preventiva quedaron los tres detectives de la Policía de Investigaciones (PDI) que fueron imputados por disparar a un padre y su hijo, en un hecho ocurrido durante la madrugada del 10 de marzo en la comuna de Colina.
La Fiscalía Centro Norte formalizó al comisario Francisco Díaz, al subinspector Juan Vivanco y a la detective Violeta Bianco por apremios ilegítimos con resultado de homicidio frustrado. No obstante, el tribunal no acogió la primera imputación, pero sí el delito de homicidio simple frustrado.
El día de los hechos, en calle Los Criadores, los funcionarios policiales se movilizaban en lo que habría sido un procedimiento policial. Sin embargo, equivocaron el objetivo de búsqueda. Bajo ese contexto, habrían pedido al automóvil de los afectados que se detuviera. Estos hicieron caso omiso y durante una corta persecución los policías abrieron fuego en reiteradas ocasiones, baleando tanto al padre y al hijo.
Ambas víctimas, de 68 y 46 años, resultaron con heridas de gravedad y fueron internados en un centro asistencial.
En su exposición, el fiscal jefe de la Fiscalía Local de Chacabuco, Gonzalo Álvarez, relató que el subinspector Vivanco disparó con una subametralladora UZI. Esto, luego de que su arma de 9 milímetros se trabara.
El fiscal afirmó que los detectives dispararon en 19 ocasiones. Ocho de esos balazos impactaron en el auto de las víctimas. El comisario Díaz, dijo el fiscal, era quien tenía una posición de “garante” debido a que era el superior jerárquico. “No hizo las acciones que correspondían a la situación, que era detener estos disparos que no tenían ninguna justificación”.
Así las cosas, desde la fiscalía señalaron que Díaz y Vivanco cumplirán la medida cautelar en el cuartel Independencia, mientras que Bianco hará lo propio en un cuartel en Temuco. El Tribunal del Juzgado de Garantía de Colina decretó 120 días de investigación.
En tanto, hoy por la mañana la PDI indicó que los funcionarios estaban “suspendidos” desde el 14 de marzo.