Durante la noche de este martes, un grupo de sujetos realizó dos balaceras en la ciudad de Calama, en la Región de Antofagasta, a pocas cuadras de distancia, dejando un saldo de un fallecido y cinco heridos.
El primer ataque fue perpetrado contra las dependencias de la Primera Comisaría de Carabineros de la referida ciudad. Según antecedentes preliminares, ocupantes de un vehículo que transitaba por avenida Granaderos realizaron una serie de disparos contra el cuartel policial. En el lugar se reportan dos civiles heridos por impactos de bala,.
Según la información entregada por el teniente coronel Alexie Chamblas, de la Prefectura de El Loa, “un vehículo con una cantidad de individuos no determinada pasó frente a la Comisaría de Calama, donde efectuó cinco disparos al cuartel hiriendo a dos ciudadanos que se encontraban en el cuerpo de guardia, uno de ellos boliviano y otro chileno, los que se encuentran fuera de riesgo vital”.
Acto seguido, los antisociales continuaron por la misma avenida hacia el norte, hasta el terminal de buses de la empresa Turbus, donde -de acuerdo al teniente coronel Chamblas- efectuaron “un ataque específico hacia cuatro personas de nacionalidad venezolana, de los cuales tres resultaron lesionados y uno fallecido”.
Detectives de la Policía de Investigaciones (PDI) llegaron hasta el sitio del suceso para realizar las primeras diligencias. Durante la madrugada se realiza un intenso operativo para dar con los autores de las balaceras.
El delegado presidencial provincial de El Loa, Miguel Ballesteros, dijo que “se están investigando dos hechos que estarían vinculados (...) tenemos cinco personas en el hospital Carlos Cisternas siendo atendidas, tres de ellas entrando a pabellón, y una persona fallecida”.
En tanto, el alcalde de Calama, Eliecer Chamorro, manifestó que “están todas las acciones policiales desplegadas en terreno. Están identificados los móviles en los cuales se perpetró este cobarde ataque. Y esto, no hay que normalizarlo. No es una simple preocupación, es una angustia y aquí hacemos un llamado al Estado, al gobierno de turno, a que pueda destinar más recursos más allá de un plan Calle sin Violencia, que requiere un tiempo de plan de acción”.