"Fueron años muy duros, la mayoría de la gente que habitaba el edificio era adulto mayor, por lo tanto no tenían posibilidad de pedir préstamos. Desde el 2010 la gente ha estado arrendado y algunos de allegados. Fallecieron cuatro personas esperando por su departamento, una de ellas fue una señora que se tuvo que ir a un hogar de ancianos porque no tenía a dónde ir".

El relato es de Victoria Covarrubias, presidenta del comité del edificio Hipólito Salas en Concepción, que el pasado miércoles fue reinaugurado tras estar ocho años en reparación, producto de los serios daños ocasionados por el terremoto del 27 de febrero del 2010.

Lágrimas de alegría, aplausos y vítores fueron parte de la jornada, que puso fin a una "verdadera pesadilla", como dicen los vecinos. Se trata de un edificio de 30 departamentos, construido en la época del 60, habitado en su mayoría por personas de la tercera edad, jubiladas y con enfermedades complejas, quienes se vieron obligados a abandonar sus hogares por el riesgo que presentaba la estructura y por la amenaza constante de caída que tenía la Torre O'Higgins, también afectada por el movimiento telúrico y emplazada a pocos metros.

"Este es un grupo humano que no tiene dinero. Antiguamente esto era un sector periférico de la ciudad. Son departamentos de 42 metros cuadrados y los más grandes tienen 53, pero el edificio no es de lujo", sostuvo Covarrubias.

Quince habitantes del dañado edificio fueron beneficiados con un subsidio de mejoramiento de áreas comunes, a través de asignación directa, por un monto de 339 UF cada uno, mientras que otros dos vecinos fueron beneficiados con un subsidio de 270 UF para la reparación interior de sus hogares.

"Jubilé el 2012, entonces era imposible arrendar algo, así que una hija y su marido me recibieron y así estuve de allegada los ocho años. Esto fue un desgaste tanto emocional como físico, me emociona mucho volver a mi hogar, yo ya lo daba por perdido", contó Ileana Núñez, una de las propietarias.

El 5 de abril del 2013 se inició la reconstrucción del edificio, el cual iba a estar listo en 2014, pero la empresa constructora presentó problemas y no terminó el trabajo. Durante el periodo sin obras, los departamentos fueron saqueados y dañados. Finalmente en 2016 se logró una asociación con la Municipalidad de Concepción y a la constructora El Boldo para terminar la reparación.

Fin de la reconstrucción

El seremi de Vivienda del Biobío, Jaime Arévalo, explicó que con este edificio "hemos logrado cerrar prácticamente el 100% del proceso de reconstrucción".

En cuanto a los otros edificios dañados por el terremoto, como el Alto del Río que colapsó, el alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz, comentó que "los propietarios de esos edificios finalmente llegaron a un acuerdo judicial y recibieron los dineros acordado mediante esa vía".