Este domingo, fue el sepelio de Camila Rojas Ayala (29) en Hualpén, Región del Bíobío.
Su fallecimiento se produjo el miércoles de esta semana en La Serena, tras ser apuñalada en reiteradas ocasiones por un vecino.
Según se expuso en la audiencia de formalización, el imputado identificado como Francisco Novoa- ingresó a las 4.00 am al domicilio de la víctima y la agredió con un arma cortopunzante, en presencia de su hija de cinco años.
El fiscal Carlos Vidal Mercado sostuvo que la agresión causó “un sufrimiento extremo e innecesario para los fines de causar la muerte a las víctimas, que a horas de la madrugada se encontraban desarmadas, durmiendo, sin ninguna posibilidad de defenderse”.
La menor de edad también fue herida con el arma cortopunzante. Estas no fueron fatales, precisamente porque su madre la protegió, de acuerdo con lo informado por el fiscal en la audiencia.
El imputado posteriormente confesó su participación en el crimen ante Carabineros y se detectó que además, estaba bajo los efectos de las drogas. Por otra parte, se confirmó que tenía antecedentes penales por hurto, medidas cautelares vigentes y que próximamente debía asistir a un juicio oral por el delito de abuso sexual.
El diario La Región de Coquimbo, informó que la joven era oriunda de Hualpén y que se había trasladado junto a su familia a La Serena, en busca de mejores oportunidades laborales.
El imputado permanecerá en prisión preventiva durante el plazo que se fijó para la investigación, 180 días.