El fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, había estado muchas veces en el Juzgado de Garantía de Rancagua. Es lógico, es el persecutor jefe de la zona, pero ayer, a las 8.50 de la mañana, llegó para sentarse en un lugar diferente al habitual. Arias estuvo en el lado de los imputados, para ser formalizado por el delito de violación de secreto y delito informático, hecho inédito en la historia del Ministerio Público.
Fue el fiscal regional de Magallanes, Eugenio Campos, quien le imputó haber extraído información interna de un servidor del Ministerio Público y luego enviársela a un familiar. Además, dijo que lo seguía investigando por tráfico de influencias, a pesar de que estos hechos no fueron formalizados. Ambos se conocen, son pares en el Ministerio Público, pero no hubo más intercambios que el saludo protocolar.
Dos horas después de la formalización, Arias - quien esta semana además fue notificado de que se inició un proceso de remoción en su contra- habló con La Tercera. Dijo estar tranquilo, que no hay nada de que arrepentirse y que no renunciará a la fiscalía, por ahora.
El fiscal Campos se refirió a usted de dos formas: el imputado señor Arias y el fiscal regional imputado. ¿Cuál le molestó más?
No me molesta. No es primera vez que soy imputado. Mira, es bastante normal que se ataque al investigador cuando está siendo incómodo para alguna persona que detenta poder. Lo que sí me molesta son las noticias falsas, y eso es extremadamente dañoso, porque uno no tiene cómo defenderse de la noticia falsa. Los medios de comunicación publicaron que se había allanado mi oficina, eso es falso. Eso molesta. También se le ha dado mucha vuelta al "histórico", "la caída de". De caída nada, la verdad que estoy paradito. Y de lo histórico: el final va a ser el histórico. Ojalá no nos acostumbremos a formalizaciones tan equívocas, porque eso hace que a la fiscalía, en definitiva, nos vaya mal en tribunales.
¿Se arrepiente de haber pedido la extracción de estos antecedentes que envió a su hermana y a su cuñado?
El derecho penal es un derecho de hechos. Entonces, es como "¿usted se arrepiente de haber enviado antecedentes a una persona que decía tener otros y que en conjunto iban a originar una denuncia de tráfico de drogas?" No, porque es lo que hacemos siempre.
¿Lo hizo para poner en conocimiento un delito?
Por supuesto, y eso está absolutamente acreditado, porque se hizo la denuncia y ahí se expresa concretamente que se hace en contra de este familiar (su sobrino). Se insinúa por el Consejo de Defensa del Estado (CDE), incluso, de que hay una filtración o vulneración de una carpeta de investigación de droga. Eso es falso. Eso permitió hacer una denuncia por tráfico de drogas ante los organismos competentes, que fue el OS-7 de Carabineros. Luego de eso, mi actuación fue verificar que se hubiese efectuado la denuncia.
¿Usted hubiese hecho lo mismo si otra persona, que no fuera su familiar, se lo hubiese pedido?
Habría que ponerse en esa hipótesis, pero en este caso, lo que hizo la diferencia es que yo, como dicen las declaraciones en la carpeta de la investigación, le señalé a mi hermana que si yo accedía al sistema tenía que hacer la denuncia. Luego, ella me pide por favor que le permita hacerlo, que es su responsabilidad.
¿Por qué después no expone estos antecedentes ante el fiscal nacional, Jorge Abbott?
Eso es bastante simple, y de eso también hay pruebas. Cuando llega esta carpeta de investigación de Puerto Montt, la toma el fiscal Sergio Moya. Yo le expliqué el caso y de inmediato cité a la directora ejecutiva regional y jefa de asesoría jurídica, Lorena Sandaña. Le digo en ese momento que iba a informar al fiscal nacional, y quien estaba subrogando era Pablo Gómez. Le expliqué el caso completo en un correo, que acredita que en ningún caso mi intención fue ocultar esto. Posteriormente, le pedí al fiscal Moya que hiciera diligencias mínimas de investigación y las remitiera al fiscal Abbott, y no lo hizo.
¿Por qué cree que no lo hizo?
No sabría explicarlo, lo que yo sí puedo exponer son los hechos que están concretamente acreditados en la carpeta de investigación, de que él tenía que enviar esa carpeta de investigación y no lo hizo, y de que él hizo otras maniobras, por ejemplo, reasignó esa causa a otro fiscal.
En sus descargos del sumario, dice que Moya no mandó estos antecedentes para perjudicarlo...
Es bien difícil meterse en las cabezas de las personas, sobre todo cuando no son como uno. Lo que sí, la consecuencia posterior es que él dice que encuentra la carpeta escondida y esa es una absoluta mentira.
El fiscal Moya es quien abre este caso, donde usted hoy está formalizado y con una solicitud de remoción. Ustedes trabajaban juntos, llama la atención esta pugna. ¿Qué pasó entre ambos?
Yo encuentro esta situación bastante grave, pero mirándolo del punto de vista del sistema de enjuiciamiento criminal en general. En este caso, lo que existió fue una denuncia falsa, efectuada con publicidad respecto de la cual no se realizaron de inmediato las más mínimas diligencias para corroborarlas. Se me denunció por tráfico de influencias, de favorecer abogados y eso ha quedado demostrado que no es así. Así concluyó el sumario y en la formalización de hoy. Pero, aquí lo grave no son las denuncias falsas, sino lo que hace el fiscal nacional, quien toma decisiones gravísimas, como la suspensión y la reasignación de todas las causas.
¿Por qué pasa esto?
Mire, ustedes publicaron hace poco una serie de WhatsApp entre Moya y Abbott, donde se da cuenta de un acuerdo bastante claro entre ambos, donde hablaban de "sacarle la mascara al superhéroe", que los "titanes del ring". Yo siempre supe de la gran cercanía que había entre Abbott y Moya, pero no a este nivel de familiaridad que existe entre ambos.
¿Cree que fue una maquinación entre ambos para sacarlo?
Yo analizo estos factores objetivos. De un fiscal adjunto que habla en esos términos con el fiscal nacional , donde hablar de a quién tiene que nombrar en la Fiscalía Sur, que se critique al Consejo Nacional de Fiscales. Es casi un asesor.
¿Cree que se confabularon en su contra?
No sé, pero el tema es otro. No es por ser ególatra, pero si no fuera porque soy una persona que investigó hechos relevantes, yo estaría en el suelo. Mi carrera no empezó en Rancagua, sino que en 2001, donde he trabajado con fiscales internacionales, vi causas de organizaciones criminales, con especialistas en drogas, me especialicé, y trabajé por llegar siempre a la cúspide de los grupos delictuales. Si no fuera por eso estaría en el suelo, que era el objetivo comunicacional de esto.
¿Por qué lo querrían en el suelo?
Tengo mi hipótesis, pero no me gusta hacerla pública sin tener una base, pero cuando empezó este caso yo pedí que se aclararan las motivaciones que originaron esta causa. Para eso hay un escollo enorme, porque vemos que en su origen está el propio fiscal nacional.
¿Dónde se originó su enemistad con Abbott, porque usted antes tenía buena relación con los fiscales nacionales?
Es solamente repasar un poco. A mí me designa don Guillermo Piedrabuena, muy bien evaluado. Y siempre investigando de la misma manera. Lo mismo hice con Sabas Chahuán. Luego comienza el cambio, cuando Chahuán me lleva a las causas de corrupción política, y ahí empezaron estas diferencias con el actual fiscal nacional. Yo lo que hago es agrupar investigaciones, lo que te permite ver de mejor manera el fenómeno. Cuando llega Corpesca, vimos que se veían fenómenos similares en todas las regiones, y luego llega esto del sumario por las declaraciones que di, donde dije que el origen de la Ley de Pesca era ilegal. Ahí Abbott separa las investigaciones, es lo que siempre hace.
¿Por qué cree que hace esto?
Habría que preguntarle a él. Pero así empieza a sacarme de ciertas causas. Yo lo que he reflexionado últimamente, es qué habría pasado si solo hubiera investigado los boleteros, a abusadores sexuales y no encubridores, si me hubiera quedado callado.
¿Hoy actuaría igual?
De todas maneras, incluso más.
¿Le mintió a la consejera del CDE, María Inés Horvitz?. Ella dice que usted se comprometió a imputar el soborno al exsíndico Herman Chadwick en el caso Caval, y que después no lo hizo.
No, eso no es así. La verdad no sé qué le pasará a doña María Inés en relación con eso. Además, el exsíndico jamás estuvo formalizado por soborno. Pero es extraña su declaración. Hay que ver qué es lo que estaba pasando, porque ella declara cuando Abbott ordena la reapertura del sumario, entonces nuevamente hay una fijación en mi contra.
¿Es una fijación de Abbott?
Sí, de Abbott, por supuesto. Si en definitiva acá, yo lo que veo es un modo de actuar, de amedrentar. Otra noticia que salió era que yo, para evitar la remoción, iba a renunciar. Yo no voy a renunciar. Yo voy a pelear hasta el final.
Pero cuando termine todo este proceso, la lectura que pueda hacer la gente es que usted va a renunciar. ¿Cómo va a seguir trabajando con el fiscal Abbott?
Mira, cuando termine este proceso voy a tomar la decisión. Y este proceso es muy dinámico, cambia día a día, pasan cosas realmente extrañas y en cierto modo muy motivadoras. Fíjate que acá también es impresionante el apoyo de la gente en la calle. Hoy día fue muy cómico el caballero del cartel, yo nunca lo había visto apoyando a nadie imputado.
El fiscal Campos expuso que investiga mensajes suyos con el removido juez Emilio Elgueta ¿Los hubo?
Yo fui en octubre del año pasado a hacer la denuncia, y yo acompañé esos mensajes a la ministra Rosa María Maggi. Esos mensajes eran que él me recriminaba por no haberme comportado como él habría esperado, relacionado con contratar a unas personas que él me había dicho que tenía que contratar. Y yo lo dije que tenían que dar la prueba como todos. Y ahí es cuando él dice, "tengo amigos contados con los dedos de la mano, pensé que éramos como amigos, no te la jugaste". O sea, es ridículo.
Usted dijo que iba a recurrir a tribunales nacionales e internacionales ¿A la Comisión Interamericana?
Por supuesto, capaz me arrepienta de no haberlo hecho antes, y luego a la Corte, si es que hubiera sido necesario. Quizás debí haberlo peleado más, mucho más y haber llegado a instancias internacionales en los otros sumarios. Pero ahora confiamos que no va a ser necesario.