Eran pasadas las 16 horas de este jueves cuando un grupo de tres sujetos -dos hombres y una mujer- de nacionalidad extranjera irrumpieron violentamente en un domicilio de calle Rapel, en la comuna de Conchalí.

Ahí, por causas que aún son materia de investigación, los antisociales agredieron con un arma blanca a un ciudadano colombiano, para luego huir con la hija de la víctima: una niña de solo 7 años de edad.

Aunque inicialmente se informó que solamente la menor había sido objeto del plagio, la investigación policial concluyó que la niña fue secuestrada junto a su madre, también de nacionalidad colombiana, a quienes los captores se llevaron en automóviles distintos.

Tal situación generó un amplio despliegue de personal de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) Antisecuestros de la PDI, junto al Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH) de la Fiscalía, que culminó pasadas las 20 horas con la liberación -en buen estado de salud- de las dos víctimas.

Según informó el subprefecto Hassel Barrientos, jefe de la Bipe Antisecuestros, “una menor de 7 años, de nacionalidad colombiana, fue extraída, secuestrada, de su domicilio donde vive junto a su familia en la comuna de Conchalí”. “El padre habría intentado evitar que se efectuara este secuestro, donde resultó lesionado con heridas cortopunzantes”, agregó.

Fue la hermana mayor de la niña secuestrada, otra menor de 12 años, quien dio la alerta sobre el hecho a vecinos. Estos encontraron al hombre ensangrentado y propiciaron su traslado a un centro médico.

Así, los equipos especializados de la PDI -Bipe Antisecuestros y Laboratorio de Criminalística (Lacrim)- y de la Fiscalía realizaron una serie de diligencias investigativas en distintos puntos de interés, incluyendo domicilios en Conchalí, Quilicura y Estación Central.

Según complementó el fiscal ECOH Francisco Lanas, madre e hija -ambas con situación migratoria regular- “son secuestradas desde el domicilio en la comuna de Conchalí, circulan por diversas calles de la comuna y de otras comunas aledañas, llegando hasta un domicilio, que es materia de investigación”.

Luego de cuatro horas, según informó el subprefecto Barrientos, se concreta la liberación de ambas, quienes se presentaron en una comisaría de Carabineros de la comuna de Renca. “Luego de ser liberadas en la vía pública, la primera opción que toman es acercarse a esta unidad policial, con ayuda de personas en la vía pública”, explicó el subprefecto Barrientos. Tanto la menor secuestrada como su hermana están siendo contenidas por especialistas de la Fiscalía ECOH.

Los equipos investigativos siguen realizando diligencias para dar con el paradero de los autores del delito, incluyendo la revisión de cámaras de seguridad.

Aunque la motivación aún se indaga, no se descarta que responda a un posible ajuste de cuentas y/o vínculos con el narcotráfico. Pese a esto, no se hicieron demandas de rescate durante el tiempo que las víctimas estuvieron privadas de libertad.

Respecto de por qué los secuestradores eligieron llevarse a la menor de las hijas del sujeto que resultó apuñalado, el fiscal Lanas sostuvo que “no hay una motivación clara”, aunque indicó que “lo más probable es que tiene que haber sido dentro de la dinámica de esta discusión y de esta resistencia que efectúa el padre al ingresar estos sujetos al domicilio”.

Sobre información que circuló durante la tarde de que el ciudadano colombiano habría sido secuestrado ayer miércoles, también por sujetos extranjeros, el persecutor indicó que es materia de investigación.

Sí confirmó que el padre de la menor tiene antecedentes, aunque “no de mayor relevancia para la investigación”, descartando detenciones anteriores relacionadas con drogas. Sin embargo, sostuvo que el domicilio donde vive la familia colombiana afectada había sido investigado anteriormente en contexto de la Ley de Drogas, pero destacó que se trata de un cité donde viven varias personas, que no necesariamente tienen relación entre ellas.