Arnaud Gerard Simón Monier (51), un ciudadano francés acusado de cometer al menos 26 delitos de connotación sexual contra menores de edad en su país, fue extraditado al país europeo tras ser capturado en Chile. En 2023 había huido a nuestro país y tras un paso por la Región Metropolitana -donde incluso se casó con una chilena- se “escondió” en La Serena, en la Región de Coquimbo.

La investigación se inició durante el año pasado, cuando Monier comenzó a ser denunciado en Francia por diversos delitos sexuales, entre ellos violación y abuso sexual de menores.

Tras sospechar que sus conductas serían investigadas, el sujeto emprendió la huida de su país. En primera instancia, vía terrestre, llegó hasta Madrid, en España, donde luego tomó un avión hacia suelo nacional, pudiendo ingresar al país, en junio del 2023, por el Aeropuerto de Santiago con una visa de turista por no mantener ninguna alerta internacional que diera cuenta de sus delitos.

El comisario Felipe Ayala, de Interpol Santiago, explicó que el hombre aseguró que “en primera instancia se quedaría en la Región Metropolitana. Mientras se encontraba en Santiago, esta persona conoció a una chilena, con quien inició una relación sentimental y posteriormente contrajo matrimonio”, tras lo cual se trasladó hasta La Serena, donde montó un negocio de pizzería familiar.

Recién en agosto pasado la Interpol emitió una alerta internacional de captura. “Una vez obtenido esta información, en coordinación entre Interpol París e Interpol Santiago de Chile, comienzan las diligencias de captura acá en nuestro país, logrando establecer que esta persona, a través del análisis criminal y de diversas vigilancias estacionarias y de trabajo de inteligencia policial, se encontraba en la ciudad de La Serena, realizando labores de repartidor de pizza. Es así como en marzo de este año, esta persona es interceptada por detectives de Interpol, siendo detenida finalmente por todos los delitos antes indicados”, agregó el comisario Ayala.

Tras la captura, el hombre fue ingresado al Complejo Penitenciario de La Serena a la espera de la decisión de la justicia respecto a su extradición, la que se concretó ayer jueves, con la visita de la policía gala para trasladar al acusado hasta su país de origen donde deberá enfrentar cargos por los que arriesga hasta 400 años de cárcel.