“Es hora de decirlo todo”: abogados y fiscal ponen contra las cuerdas a Nicolás Zepeda en la recta final del juicio
El fiscal buscó que Zepeda reconociera que fue Narumi quien puso fin a la relación y que este actuó bajo el “honor del hombre herido”. Durante todo el interrogatorio, que se extendió por varias horas, Zepeda se mantuvo firme en su versión y negó ser el autor del crimen de la joven.
Una intensa jornada de interrogantes vivió este martes Nicolás Zepeda en el Tribunal de Vesoul, Francia, en el décimo primer día del juicio de apelación en su contra por la desaparición y muerte de la joven japonesa Narumi Kurosaki.
El chileno de 33 años respondió punzantes preguntas del abogado de la familia de Narumi, del representante de la expareja de la japonesa y del fiscal. Ya el lunes Zepeda, quien en un primer juicio fue condenado a 28 años de cárcel, fue interrogado por el presidente del tribunal. En una larga jornada, se defendió de la imputación de ser el autor del crimen, en un hecho ocurrido en diciembre de 2016.
Eso sí, reconoció una nueva “mentira”. Una testigo identificada como Rachel afirmó haberlo visto merodeando la residencia estudiantil, algo que Zepeda había negado. Hasta ayer. “En primera instancia mentí, porque me sentía acorralado”, dijo.
Por otra parte, se contradijo en el día que dejó la habitación 106, donde estuvo junto a la japonesa. A Interpol le dijo que se fue el 5 de diciembre y durante este juicio señaló que fue el 6. “No consideré imprescindible ser preciso”.
¿Narumi estuvo embarazada?
Este martes. en una primera parte, Sylvie Galley, abogada de la familia, comentó un mensaje que la joven le habría enviado a Zepeda en octubre de 2016. En él se señala que la mujer habría quedado embarazada del chileno. “Nunca olvidaré que me dejaste embarazada, nunca te sientes responsable de mi embarazo, que horrible es, me siento como una idiota, nunca lo ‘olvido’. Nunca me tomaste en serio, lastimaste mi cuerpo, te llevaste a mi futuro hijo”, se señaló.
Zepeda explicó que en el pasado, debido a un retraso en el período de Narumi, acudieron a ver a un médico en Japón. “Ella nunca estuvo embarazada”, aseguró el acusado.
El chileno ha sostenido que concurrió a ver Narumi a fines de noviembre de 2016. En ese tiempo ya habían terminado y la joven estaba saliendo con Arthur del Piccolo. Según Zepeda, durante el 4 de diciembre se reunió con Narumi. Fueron a comer y luego a la residencia estudiantil de la joven, donde tuvieron relaciones sexuales. “Cuando tienes sexo con Narumi está la foto de Arthur Del Piccolo sobre el escritorio. ¿No te importa verla?”, lanzó la abogada. “Nunca he visto esta foto. No era visible en la habitación”, respondió el acusado.
Galley fue más allá y apuntó a una posible hipótesis: que Zepeda ocultó el cuerpo de la joven en una maleta. “¿Tenías alguna duda de que Narumi estaba realmente muerta cuando la pusiste en la maleta?”, disparó la abogada. “No lo hice’ “No maté a Narumi, no la metí en una maleta”, se defendió el joven.
Luego fue el turno de Randall Schwerdorffer, abogado de Del Piccolo, quien lo acusó derechamente de “mentiroso”.
El profesional apuntó a las compras que realizó Zepeda previo a ir a visitarla. En concreto, según se estableció en el primer juicio, el acusado compró fósforos, un bidón con un líquido inflamable y productos de limpieza. “E imagina que no compras una caja de cerillas, sino un paquete de tres, 240 cerillas. No fumas, no tienes estufa, tal vez sea para encender una vela, pero en las iglesias que te gustan ya están encendidas”, acusó el abogado, y continuó: “¿No crees que una mente descuidada podría asociar este combustible, estas cerillas y el cuerpo de Narumi?”.
“Sí y hoy lo estoy pagando muy caro”, respondió.
“Todos mentimos”
Posteriormente, fue el turno de las preguntas del fiscal Étienne Manteaux, quien comenzó cuestionando por qué las hermanas de Zepeda no lo han apoyado en el juicio. “Se consideró que para este tipo de testimonio, sobre mi carácter, el testimonio de mis padres y de mi amigo Alexandre era suficiente. Pero cuento con el apoyo de mis hermanas, tengo noticias de ellas”, respondió.
“Realmente es hora de decirlo todo, señor Zepeda. Durante este juicio, usted hizo seis nuevas revelaciones, seis realidades ferozmente negadas durante siete años”, agregó el persecutor.
El fiscal buscó que Zepeda reconociera que fue Narumi quien puso fin a la relación y que este actuó bajo el “honor del hombre herido”. “¿Es tu orgullo masculino el que te hace negarte a admitir que fuiste tú quien fue a verla?”, exclamó el fiscal. El acusado rechazó que esto fuera así.
El fiscal citó mensajes que el chileno envió en su minuto a Narumi: “Decidiste destruirme, quería casarme contigo, tener una casa, hijos’'. La respuesta de la joven fue: ‘’Vete a la mierda’'. “Estas son tus palabras, eres tú quien las escribe en el teclado”, dice el fiscal, ante lo que Zepeda responde: “No recuerdo el contexto”.
Así las cosas, el fiscal apuntó a la compra de Zepeda de un bidón con líquido inflamable. Según la explicación del chileno esto fue porque buscaba el contendor, no el contenido del mismo. “En este Carrefour hay bidones vacíos. Tu explicación es inverosímil”, dijo el fiscal.
Otro punto abordado por el fiscal fue el supuesto hackeo que hizo el chileno a las cuentas de redes sociales de Narumi. Esto ha sido rechazado por el acusado. Sin embargo, el fiscal, basándose en los registros de Google, arrojó que la última fecha de sincronización de la cuenta de Gmail de Narumi fue el 13 de diciembre en Santiago, el mismo día en que el acusado aterrizó en Chile.
Avanzada la tarde francesa, el fiscal apuntó a las “mentiras” de Zepeda en torno al caso y reconocidas en este segundo juicio. La primera de ellas fue cuando reconoció que viajó a Francia a buscar a Narumi, lo que antes había sido explicado con un falso viaje a “buscar universidades”.
“Has mentido varias veces, pero ¿por qué mentir cuando no tienes nada que reprocharte?”, dijo el fiscal Manteaux.
La respuesta de Zepeda fue la siguiente: “No mentimos solo porque tenemos cosas que reprocharnos. Todos mentimos, hay diferentes tipos de mentiras. Mentimos porque a veces tenemos miedo. No puedo explicarlo todo. En este caso me invadió el miedo porque vi que alguien quería culparme por algo que no había hecho. No tengo ninguna relación con esta desaparición. Yo también quiero saber qué pasó”.
Durante todo el interrogatorio, que se extendió por varias horas, Zepeda se mantuvo firme en su versión y negó ser el autor del crimen de Narumi. Se estima que el juicio llegue a su fin esta semana.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.