Alison Acosta es la esposa del subteniente de Carabineros, Luis Faúndez, quien resultó herido con una bomba molotov, durante manifestaciones del reciente domingo en la noche, en Peñalolén. El policía estará internado cerca de un mes, tanto por la gravedad de las lesiones físicas como psíquicas.
La familia de Faúndez está molesta. Ayer, Acosta presentó una querella por homicidio frustrado, para que se investigue a los presuntos responsables del ataque, hecho que, además, ya está siendo pesquisado por la Fiscalía Oriente.
La mujer sostuvo que “la presentación de esta querella es lo mínimo que puedo hacer por mi esposo. Todo ha sido muy traumático y duro, sobre todo para él, pero también para toda nuestra familia. Nuestra hija también está sufriendo mucho por su papá. Yo sólo quiero que se haga justicia y que se busque a los responsables de estos atentados. No pueden seguir ocurriendo hechos como estos".
Según el relato de la mujer, en la querella presentada a través de sus abogados, Sergio Contreras y Conall Morrison, el diagnóstico del carabinero arrojó que quedó con una quemadura en su pierna derecha, así como también el trastorno de estrés postraumático. Por tal motivo, de acuerdo a lo señalado en el escrito, el policía actualmente está internado en la Clínica Psiquiátrica El Arrayán, ubicada en Lo Barnechea.
Tres semanas hospitalizado
Alison Acosta, quien es contadora auditoria, agregó que "mi marido va a tener que estar al menos tres semanas hospitalizado, este ataque incendiario cambió la vida de todos nosotros. Es muy injusto, él sólo está cumpliendo con su deber, con su trabajo de carabinero. Me cuesta entender que haya gente que quiera hacerle daño sólo por el hecho de ser carabinero. No quiero más violencia contra Carabineros. Por esto mi esposo está internado hoy. Pero sé que hay muchos que están igualmente expuestos. Esto tiene que parar”.
Esta semana, la policía estará abocada en un 100% de su dotación para el control de orden público, en la antesala del primer aniversario del denominado 18-0. Los uniformados entraron ya hace una semana en la condición de “apresto”, es decir, no se otorgarán ni vacaciones, ni licencias médicas de última hora. Esta situación se extenderá hasta el 25 de octubre, día del plebiscito.
Desde la fundación “Nos Importan”, agrupación que proporciona asistencia jurídica a uniformados involucrados en casos de orden público, señalaron que “la querella presentada por la señora del carabinero Faúndez refleja un sentir de muchos uniformados respecto de las graves condiciones en que se encuentran trabajando los funcionarios de Carabineros hoy”.
En ese sentido, agregaron que “para un carabinero salir a trabajar en días como estos implica no saber cómo van a volver a su casas (...) Si queremos una sociedad próspera y en paz, hoy debemos fortalecer a Carabineros, no destruirlos. Todos tenemos una responsabilidad en esta tarea”.