Luego de que la Superintendencia de Servicios Sanitarios anunciara el viernes la apertura de un expediente de caducidad a la concesión de la empresa Essal, la firma se expone a multas de hasta $ 2.500 millones por el derrame de combustible del 11 de julio pasado en la Región de Los Lagos, y que dejó a Osorno durante 11 días sin agua potable.
La decisión de la Superintendencia abrió, además, otra ventana -o discusión- legal, pues la comunidad de Osorno pidió, a través de manifestaciones de las juntas de vecinos de la ciudad, que parte del dinero de la multa vaya en beneficio de la propia comunidad.
La idea podría concretarse. Así lo explicó a La Tercera el intendente de la Región de Los Lagos, Harry Jürgensen: "Hay que buscar una forma para que una parte de las multas vaya al fondo de desarrollo regional, de tal forma que se puedan aplicar a un programa social del gobierno regional, para recuperar los daños".
La autoridad regional agregó que "vamos a tener estos días, en Santiago, conversaciones con el Ministerio de Hacienda, la Dirección de Presupuestos y también con la Superintendencia, para ver si existe esta posibilidad, porque los impuestos y multas no tienen destino". Así, Jürgensen se mantendrá hasta el martes en Santiago.
Juntas de vecinos
La presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Osorno, Eliana Catrilef, fue más allá. Propuso "ocupar esa plata en alguna inversión para la ciudad, como, por ejemplo, hacen faltas estadios, jardines infantiles y centros de salud".
Essal tiene diez días hábiles para hacer sus descargos en el proceso de sanción.
Los resultados de la investigación de la Superintendencia revelaron seis faltas por parte de la empresa en la emergencia, entre ellas, el incumplimiento de la obligación de calidad de servicio. También apuntaron a que la firma puso en peligro la salud de la ciudadanía.
En paralelo a la investigación de la Superintendencia, el Ministerio Público continúa con las diligencias en la arista penal del caso. Se espera que durante los próximos días se sigan concretando declaraciones de trabajadores de la firma.