A solo días que se dé inicio a la 63° versión del Festival de Viña -que en esta oportunidad tendrá un enfoque solidario, en virtud de los incendios que afectaron a algunos sectores de Valparaíso a inicios de febrero-, la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, se refirió a la catástrofe y lamentó que con el pasar de los días la ayuda ha disminuido.
“Pasan los días, una catástrofe de esta magnitud conmueve a las personas, pero eso no dura más de 70, 100, 200 horas, un par de días. Y ya ven ustedes cómo están las calles de Villa Independencia, del Olivar. Ya no llega la ayuda como llegaba antes. Estamos solos como municipio de Viña del Mar y parte de los servicios públicos del Estado”, señaló la jefa comunal en medio de una conferencia de prensa del evento musical, que iniciará este domingo 25 de febrero.
Si bien, Ripamonti destacó los trabajos de 38 organizaciones, iglesias, las Fuerzas Armadas y las policías, recalcó que “el orden de magnitud es gigantesco. Esto es el 35% de la comuna de Viña del Mar”.
“Agradezco fundamentalmente que el contenido del festival se ponga a disposición de esto, que exista un proceso recaudatorio que sea de corte internacional, porque aquí desde todo el mundo van a poder apoyar a la comuna de Viña del Mar y que así logremos recaudar para las personas que han sido víctimas”, manifestó la alcaldesa.
Además, dijo esperar que el evento sirva para “poner nuevamente en el debate público lo que está sucediendo y que no nos olviden”.
Por otra parte, la alcaldesa reconoció que enfrentar esta versión del certamen “ha sido todo un dilema” y que fue “difícil” decidir si se haría o no.
En esa línea, dijo que esta, ha sido la emergencia “más grande de la historia de nuestro país, donde cientos de personas fallecían, vecinos de nosotras, amigas de nosotras. Y desde ese punto de vista, no iba a haber festival si es que este no tenía un carácter diferente. Es decir, solidario”.