Durante esta tarde, un grupo de 1031 estudiantes de la Universidad Católica firmaron una declaración pública donde piden a las autoridades de la institución el desalojo de la toma que se está desarrollando en Casa central.
Los firmantes se manifiestan a favor de las demandas del movimiento feminista, pero en contra de la toma del edificio ubicado en Alameda con Portugal, afirmando que "la articulación de ésta fue organizada, en su mayoría, por grupos externos a la comunidad universitaria y en total hermetismo. La tolerancia al uso de este tipo de métodos excesivos, es avalar la coerción como un medio para aprobar una solución que debería ser transversal".
Además, solicitan sanciones a los responsables de la ocupación y un sumario. También la revisión del petitorio por "contener disposiciones contrarias al ideario y espíritu de nuestra institución, sin perjuicio de que otras de éstas sean absolutamente válidas" y el resguardo de los alumnos que se mantienen en el edificio.