Los días pasan y los familiares de los dos jóvenes chilenos detenidos en Malasia, Felipe Osiadacz y Fernando Candia, buscan toda la ayuda posible para que no sean acusados de homicidio y no arriesguen pena de horca tras un confuso incidente que terminó con la vida de un hombre en Kuala Lumpur el año pasado.
Los padres de los chilenos acusan que el riesgo de contraer enfermedades es alto debido a las condiciones carcelarias, por lo que solicitan a Cancillería que puedan recibir las vacunas contra la malaria, fiebre amarilla y hepatitis.
Este requerimiento está siendo tratado por el senador RN, Francisco Chahuán y por el abogado que lo asesora, Juan Carlos Manríquez.
Esta solicitud tomó fuerza luego de que la familia fuera recibida el jueves por el ex Presidente Eduardo Frei, en su calidad de embajador en misión especial para el Asia-Pacífico.
Los chilenos están siendo investigados penalmente por la justicia de Malasia y el juicio está programado para agosto, instancia que se espera que estén presente tanto sus familiares como autoridades de cancillería.
Al respecto, el senador Chahuán agradeció el apoyo del ex Mandatario en la causa, destacando que "es una persona que tiene una amplia red de contacto en el Asia- Pacífico y por ello, ha comprometido su apoyo y su respaldo a los jóvenes".
"Ya se sostuvo una reunión en el transcurso de esta semana donde recibió a uno de los padres en representación de las dos familias y junto al abogado Juan Carlos Manríquez, estamos buscando una estrategia que nos permita agilizar el retorno de los jóvenes a nuestro país", apuntó el parlamentario.