12 horas de operación y más de 50 profesionales de la salud del Hospital de Puerto Montt estuvieron trabajando arduamente para poder extirpar exitosamente el tumor neural gigante que mantenía postrado a Mario Dumenes (54), quien requirió de casi tres meses de hospitalización en la UCI del recinto para completar su recuperación.

Es la primera vez en Chile que un paciente puede retomar la normalidad luego de la extirpación de este tipo de tumor, que si bien al principio era pequeño, el volumen, su localización y relación con distintos órganos, hacían que el riesgo de la disección fuera muy alto, explica el neurocirujano, doctor Julio García. Además, agrega que “ha existido un desarrollo excepcional en adelantos tecnológicos, técnicos y humanos del Hospital de Puerto Montt, con lo cual fue posible plantear una cirugía que no era posible previamente”.

Mario Dumenes, de 54 años y vendedor ambulante de la comuna de Fresia, llevaba más de 30 años conviviendo con una enfermedad hereditaria llamada neurofibromatosis, que causa el crecimiento de tumores neurales en todo el cuerpo, y con ello, la imposibilidad de proceder quirúrgicamente, ya que siempre se le catalogaron como inoperable. Estos tumores provocan dolor, deformidad y alteraciones neurológicas, pudiendo incluso llegar a la muerte. Mario se encontraba postrado, con altas limitaciones físicas por el intenso dolor que le provocaba. Una de las particularidades de estos tipos de tumores, es que pueden alcanzar dimensiones gigantescas: el que crecía en su cuerpo llegó a pesar 45 kilos.

Pero, ¿cómo fue posible este procedimiento? El neurocirujano, Julio García, junto con doctores del equipo de neurocirugía de columna, actuaron en coordinación con doce especialistas más que analizaron la viabilidad de la intervención, con la colaboración además de un neuro radiólogo para evitar hemorragias, y un equipo de cirugía plástica para el complejo cierre de la herida, además del delicado postoperatorio por parte de la Unidad de Paciente Crítico.

Mario gana funcionalidad para todos los años futuros, ya que la probabilidad de que vuelva a crecer un tumor de esas magnitudes es extremadamente remota”, comentó el doctor Julio García sobre los beneficios del resultado del procedimiento para el paciente.

Finalmente, Mario reflexionó sobre los buenos resultados de la operación: “Estoy feliz de la vida, agradecido de los doctores que me operaron (...) Me fui a despedir del tumor que me sacaron. Muchas veces uno no quiere ver las cosas o recordar, pero es necesario para cerrar todo ese periodo”.

Extirpan tumor neural de 45 kilos a paciente en Puerto Montt