Este sábado el cardenal Ricardo Ezzati ofició la misa del inicio del año pastoral, a horas que se supiera que el Papa Francisco aceptó su solicitud de renuncia y designara al obispo Celestino Aós como administrador apostólico de sede vacante de la arquidiócesis de Santiago.

"Hoy día, al terminar mi servicio, con la conciencia muy tranquila y muy serena les puedo decir que he sido fiel a esa promesa, más allá de las fragilidades de la lucidez y de la conciencia que tiene que ser muy iluminada para tomar las decisiones más oportunas", señaló el clérigo.

En la ceremonia, realizada en la Iglesia de los Sagrados Corazones de Alameda, el religioso se refirió a los abusos cometidos por parte de miembros de la iglesia asegurado que "el dolor de los pecados y de los crímenes cometidos de parte de la miembros del comunidad eclesial avergüenza y nos solicita pedir perdón una y mil veces y nos estimula a encontrar caminos de comprensión, de prevención".

La decisión del Vaticano respecto la renuncia de Ezzati se dio a conocer un día después de que la Octava Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago rechazara la petición de sobreseimiento definitivo realizada por la defensa del religioso en el marco de la investigación del Ministerio Público por presunto encubrimiento de abusos de menores de parte de miembros del clero.

Se espera que cerca del mediodía el sacerdote haga un punto de prensa donde se refiera específicamente a su salida de la arquidiócesis de Santiago.