Hace tres semanas empezaron a llegar al cuartel de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales Metropolitana de la PDI, denunciantes de presuntos abusos sexuales cometidos por sacerdotes de la Compañía de Jesús. Fueron citados a declarar como testigos, luego de que el jefe de delitos sexuales de la Fiscalía Sur, Guillermo Adasme, ordenara iniciar las diligencias.
Es la misma fiscalía que indaga a miembros de la Congregación de Hermanos Maristas por presuntos delitos sexuales de religiosos. Según fuentes del caso, en el marco de esa indagatoria empezaron a surgir antecedentes que llevaron a los persecutores a investigar a los sacerdotes jesuitas. Esto, luego de que un denunciante de un religioso marista entregara nombres de personas que habrían sido presuntamente abusadas por miembros de la Compañía de Jesús.
Las mismas fuentes señalan que, en total, son cuatro los sacerdotes jesuitas imputados y al menos 90 las presuntas víctimas ya identificadas.
Los religiosos a los que apunta la investigación del Ministerio Público ya son conocidos, debido a que han sido denunciados públicamente por las presuntas víctimas e incluso los propios jesuitas han abierto investigaciones canónicas en su contra. De hecho, la congregación ha hecho públicos los antecedentes de estos sacerdotes y las investigaciones eclesiales en cada caso.
Sin embargo, esta es la primera vez que están siendo investigados en el ámbito penal. Se trata del exprovincial de la Compañía de Jesús en Chile, Eugenio Valenzuela, y de los sacerdotes Jaime Guzmán, Leonel Ibacache y Juan Miguel Leturia. Este último falleció en 2011.
A raíz de los antecedentes recopilados, hace dos semanas el fiscal regional Sur, Raúl Guzmán, envió la información de los casos de los jesuitas al fiscal nacional, Jorge Abbott. Esto, a fin de que la máxima autoridad del ente persecutor fuera informada sobre las pesquisas y determinara quién será el fiscal que seguirá adelante con la indagatoria.
Un alto porcentaje de los denunciantes correspondería a eventuales víctimas del sacerdote Jaime Guzmán, por fotografías de desnudos.
Entre los testigos que ya han declarado está Allan Pineda, denunciante del sacerdote Guzmán, quien fue a la PDI este 1 de abril. "Yo había puesto una denuncia el año pasado con Waldo (Bown), el abogado de los jesuitas para ver las denuncias canónicas, y ahora se dio la oportunidad de hacerla ante la PDI", dijo Pineda.
Indicó que, como exalumno del Colegio San Ignacio de El Bosque, participó en los retiros espirituales que se hacían en un terreno de la congregación en el Cajón del Maipo, en los que el sacerdote Guzmán "nos sacó unas fotos desnudos, tanto grupales como individuales, porque estaba todo el rato sacando fotos". Dijo que entregó las fotos a la PDI y los anuarios del colegio donde se mencionan los retiros. Agregó que en esa época "también estaba el padre Leturia".
El primero en declarar fue Helmut Kramer, denunciante de Leonel Ibacache. "A medida que fui metiéndome más en estos temas me di cuenta de la importancia que tenía la investigación que estaba realizando la fiscalía y cómo ellos tratan de ir armando todas las redes de protección interna dentro de la Iglesia, y frente a eso me pareció importante aportar con mi caso", dijo.
Desde la Compañía de Jesús informaron a La Tercera que se han entregado a la fiscalía todos los antecedentes relativos a las situaciones de presuntos ilícitos, puntualizándose que el 23 de agosto del año pasado presentaron ante la Fiscalía Nacional los casos denunciados a la congregación. Se dijo también que esa presentación fue efectuada a la Unidad Especializada en Derechos Humanos, Violencia de Género y Delitos Sexuales. En la orden, además, se asegura que el 21 de marzo pasado se volvieron a ratificar esos casos y a agregar dos más ante la misma oficina de la Fiscalía Nacional.