Poco más de cuatro años de pena -la que no será efectiva, es decir, no deberá cumplir en prisión- es el acuerdo de juicio abreviado al que llegó el abogado de Raúl Schüler, Carlos Cortés, y el fiscal de Alta Complejidad de la Región de OHiggins, Jorge Escobar.

El empresario fue formalizado el 20 de diciembre de 2018 como autor de los presuntos delitos de receptación, infracción a Ley de Monumentos Nacionales y a la Ley de Control de Armas, por la presencia de cerca de 20 piezas de interés histórico reportadas como robadas en su fundo de San Francisco de Mostazal.

El persecutor envió un escrito al Juzgado de Garantía de Graneros el 6 de noviembre pasado. "Encontrándose los suscribientes de acuerdo en los términos de un juicio abreviado en la presente causa, venimos a solicitar a usted se sirva fijar audiencia para tal efecto", señaló Escobar.

El 25 de octubre, el Ministerio Público había pedido al tribunal una audiencia para reformalizar al empresario por los mismos ilícitos que le imputaron en diciembre pasado.

El juez Rubén Donoso fijó para el miércoles 27 la audiencia de reformalización y el abreviado.

Los términos del acuerdo aún están en negociación entre las partes, como cuál será la multa, el pago que realizará Schüler para resarcir el mal causado y la pena de libertad vigilada que deberá cumplir.

En su declaración del 17 de diciembre de 2018, el empresario dijo: "He gastado una brutalidad de dinero comprando todas estas cosas. Tenía un proyecto de vida y una de mis maneras de sentirme realizado era dejar todo esto como herencia, encuentro que en este país destruyen todo, no hay memoria de nada. Yo quería conservar este patrimonio arquitectónico para el país".

Y agregó: "Tengo cerca de 100 estatuas. Es importante recalcar que ellas y el parque nunca lo he mantenido oculto (...). Me imagino que si alguien supiera que tiene cosas robadas no las mostraría o no permitiría que se exhibieran públicamente como yo lo permití".