La Fiscalía se refirió a la decisión de la justicia argentina de acoger la solicitud chilena y extraditar al comunero mapuche Facundo Jones Huala -quien se fugó de Chile en enero de 2022- y quien aún podría recurrir a la Corte Suprema transandina para evitar su traslado al país para cumplir con el saldo de condena pendiente.
Jones Huala, de 37 años, de nacionalidad argentina y sindicado como el líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) fue capturado en enero de este año en suelo argentino. Sin embargo, en territorio nacional aún tiene una condena pendiente por un año, cuatro meses y 17 días, por ser el autor material de un ataque incendiario y porte ilegal de armas de fuego, sentencia que le fue impuesta el 21 de diciembre de 2018 por el Tribunal Oral en lo Penal de Valdivia.
Huala aún cuenta con una instancia de apelación frente a la determinación del Juzgado Federal de Bariloche y que ya fue anunciada por la defensa, por lo que el Ministerio Público chileno espera que tal recurso se resuelva en un breve tiempo.
El director de Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones, Antonio Segovia, se mostró conforme con la determinación de la justicia argentina, indicando que “entendemos que es una decisión que se encuentra ajustada a derecho, que se encuentra ajustada a las normas nacionales e internacionales que regulan este proceso de extradición y se encuentran además, ajustadas a los antecedentes que les remitimos a las autoridades argentinas y que fueron evaluados para arribar a esta decisión que accede a nuestra petición de extradición”.
No obstante, explicó que la decisión del juez argentino Gustavo Villanueva, es de primera instancia. “Es decir, es una resolución, un fallo que todavía puede ser objeto de recursos de impugnación por parte de la defensa del imputado. En particular, entendemos que resulta aplicable un recurso de apelación ante la Corte Suprema”, afirmó Segovia.
En esa línea, agregó que “nosotros esperamos que si, efectivamente se deduce un recurso de apelación, sea conocido por la Corte Suprema Argentina a la mayor brevedad posible con el objetivo que, en definitiva, el imputado vuelva a nuestro país y termine de cumplir la condena que le fuera impuesta por tribunales chilenos”.
Esto, ya que, de efectuarse la presentación del recurso, “no habría un plazo determinado para que la Corte Suprema ponga en tabla y analice un eventual recurso de apelación que interponga la defensa del imputado”, de acuerdo a Segovia.