Entre el lunes y martes, la Policía de Investigaciones detuvo a 17 sujetos por delitos relacionados al almacenamiento y distribución de pornografía infantil.
Se trata de hombres, todos chilenos, de entre 20 a 72 años, residentes de las ciudades de Arica, Antofagasta, Valparaíso, Santiago y Biobío.
De acuerdo a información de la causa, los sujetos participaban en chats a través de distintas aplicaciones de mensajería. En esos chats, los sujetos compartían fotos de menores de edad.
Las diligencias fueron encabezadas y coordinadas por el fiscal de la región de O’Higgins Emiliano Arias y por el jefe nacional de Cibercrimen de la PDI, el prefecto inspector, Maximiliano Mac-Namara.
En los peritajes realizados en los dispositivos de los imputados, la Policía de Investigaciones encontró más de 10 mil imágenes de menores de edad. Asimismo, incautaron 21 teléfonos celulares y 11 pendrives.
Nueve de los imputados quedaron con prisión preventiva, siete con firma quincenal y arraigo nacional, y uno quedó con arraigo nacional y arresto domiciliario nocturno.
Tras la audiencia, el fiscal Arias dijo que se encontraba “muy conforme” con lo resuelto por el tribunal. “Esta es una primera etapa, se trata de explotación sexual de niños, niñas y adolescentes a través de un sinnúmero de aplicaciones”. El persecutor, citando lo referido por la jueza, agregó que “se trata de una organización criminal de naturaleza internacional”. La internacionalidad, explicó, se debe a que “se trata todo a través de internet, de la web. No tiene ninguna lógica aplicar el concepto de territorialidad”. A eso se suma que en estos chats frecuentados por pedófilos hay sujetos de diferentes países.
