En el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago hoy fue formalizado el excomandante en jefe del Ejército, Humberto Oviedo, por el supuesto delito de lavado de activos en una presunta malversación de más de $240 millones.
Oviedo, quien está procesado en la justicia militar, ahora es formalizado por la fiscalía Centro Norte, que lo investiga por haber realizado presuntas maniobras para ocultar la malversación de dineros provenientes de gastos reservados asignados a la institución castrense.
Según el Ministerio Público, el exgeneral, quien fue comandante en jefe entre 2014 y 2018, habría realizado reiteradas operaciones de inversión y rescate de fondos mutuos, a fin de ocultar irregularidades.
En la justicia militar, la jueza Romy Rutherford acusó que el excomandante recibió cada 30 días $6 millones que tenían como origen los gastos reservados y como destino el uso personal. El análisis de Rutherford permitió determinar que entre 2014 y 2017 se depositaron $200 millones en efectivos a través de 43 trámites bancarios.
Audiencia
Durante la audiencia de esta mañana, el fiscal José Morales relató una serie de millonarias transferencias que habrían dio a parar a las cuentas personales del exuniformado.
Morales señaló que Oviedo, en el desempeño de su cargo como comandante en jefe del Ejército, “procedió a instruir verbalmente a quien se desempeñaba entonces como director de Finanzas del Ejercito para que parte de los recursos fiscales recibidos por el Ejército por concepto de gastos reservados fueran entregados al jefe del Departamento de Finanzas de la Comandancia en Jefe del Ejército, en este caso el coronel Sergio Vásquez Undurraga, en forma parcializada y en requerimiento verbal del propio imputado, por una cantidad de $2.900 millones en razón de $745.200.000 anuales, provenientes de gastos reservados en moneda nacional y dólar con el objeto de ser destinados a lo que se denominaba ‘recursos extraordinarios del comandante en jefe del Ejército o recursos de libre disposición del comandante en jefe del Ejército’”.
Morales dijo que con el fin de “ocultar el uso de estos recursos” Oviedo instruyó en forma verbal “que se destruyera cualquier documento de respaldo que diera cuenta del verdadero destino de los fondos fiscales una vez que recibía la rendición verbal de los respectivos jefes de Finanza de la Comandancia en jefe del Ejército”.
Para efectuar el lavado de dinero, según el persecutor, Oviedo efectuó varios movimientos, como comprar bienes raíces, cuentas bancarias en Chile y el extranjero, utilizar tarjetas de crédito y depósitos en la cuenta de su esposa, Marianne Stegmann.
Morales detalló los depósitos que habría recibido Oviedo en diversas cuentas provenientes de gastos reservados. Ahí figuran depósitos en efectivo a una cuenta corriente del Banco BCI por $191.343.645, otro a una cuenta de Banco Estado por $11.100.000 y otro a una cuenta de Banco Estado de la esposa por $8.164.118.
“El señor Humberto Oviedo realizó múltiples operaciones que le permitieron inyectar fondos de origen desconocidos en sus cuentas bancarias los cuales se fueron fusionando con sus ingresos lícitos”, dijo.
Finalmente, el tribunal decretó mantener la medida cautelar con la que Oviedo ya estaba en la justicia militar: esto es firma mensual, que realiza en Temuco, y arraigo nacional. Se fijaron seis meses de investigación.