En prisión preventiva quedó Dylan Aguayo después de ser formalizado por la Fiscalía Regional de La Araucanía por los cargos de tráfico de sustancias ilícitas y de armas de fuego ante el Juzgado de Garantía de Collipulli.
De acuerdo a la investigación liderada por la Fiscalía de Alta Complejidad en la Región de La Araucanía, el detenido habría sido el nexo entre las personas que cultivaban marihuana al interior de la comunidad de Temucuicui, comuna de Ercilla, y los narcotraficantes de otras regiones que comercializaban la droga adquirida por 8 mil pesos el gramo. Dichos antecedentes fueron expuestos, a través de escuchas, durante la audiencia de formalización.
El 3 de junio personal de la Policía de Investigaciones (PDI) de Angol ingresó al domicilio de Aguayo ubicado en Los Ángeles, Región del Biobío. Allí el sujeto mantenía cuatro plantas de marihuana, 52 gramos de cannabis sativa y 590 mil pesos en efectivo, proveniente de la venta de dicha droga. La Fiscalía estableció que, por lo menos desde octubre de 2020, Aguayo se dedicó a la distribución de marihuana la cual obtenía de su proveedor Kevin Espinoza Cifuentes, conocido como “Bolón”.
Las escuchas reveladas durante la audiencia entre Aguayo y Espinoza evidenciaron, además, que el imputado ejercía como interlocutor de Espinoza con delincuentes de otras comunas del país para la adquisición de armas de fuego y municiones. A su vez, Espinoza es yerno de Jorge Huenchullán, uno de los blancos investigativos que la Policía de Investigaciones (PDI) buscaba desde enero, cuando ingresó a la comunidad de Temucuicui.
“Este imputado cumple un rol clave en esta organización, tanto en la distribución de la droga cultivada como en la adquisición de armas y municiones”, detalló el fiscal de alta complejidad, Enrique Vásquez, quien dirige la investigación. “El imputado se encargaba de distribuir la droga que tenía su origen en la comunidad de Temucuicui, para lo cual tenía diversos proveedores, y él hacía de intermediario entre estos proveedores y los sujetos que se dedicaban al tráfico de drogas en distintas ciudades”, agregó.
Según la investigación, en octubre de 2020 Aguayo viajó a Valdivia junto a otros acompañantes para comprar dos pistolas, a petición de Espinoza, quien le había entregado el dinero en efectivo. La transacción no se concretó ya que Aguayo huyó del lugar ante la posibilidad de sufrir un asalto por parte de los vendedores. Ese mismo mes, el imputado viajó a junto a otros sujetos hasta Temuco para comprar un fusil por $2.800.000 pesos y luego regresó a la comuna de Ercilla, donde se encuentra ubicada la comunidad de Temucuicui.
En abril de 2021, Aguayo se dirigió hasta la población La Legua Emergencia, comuna de San Joaquín, portando cinco kilos de marihuana. Esta mercancía sería permutada por un fusil, sin embargo, el intercambio no se pudo concretar. Luego, se determinó gracias al trabajo del personal de la Brigada Antinarcóticos de la PDI -autorizado por el Juzgado de Garantía de Collipulli- que en junio Aguayo recibió una llamada de Jorge Chacón, unos de sus proveedores de droga. En esa instancia acordaron la compra de 900 gramos de marihuana, por lo que ambos se reunirían en el sector rural de la comuna de Ercilla.
Acto seguido, la policía efectuó puntos de vigilancia discreta en las probables rutas utilizadas por los sujetos. Al momento de ser identificado y posteriormente detenido, Jorge Chacón portaba en la parte trasera del asiento del copiloto de su Toyota una bolsa de cartón donde guardaba 917 gramos de marihuana, envueltos en nylon. Éstos le habían entregados por Aguayo.
A propósito de lo ocurrido, el día sábado el nuevo fiscal regional de La Araucanía, el abogado Roberto Garrido, manifestó en una entrevista con La Tercera: “Si logramos detectar de dónde viene el financiamiento de estos actos de violencia, vamos a poder desbaratar a estos grupos de violentistas y así llevar a todos los responsables ante la justicia”. Garrido asumió durante esta semana su nuevo cargo; además, fue quien investigó a los ejecutores del asesinato del comunero mapuche Camilo Catrillanca, ocurrido en 2018.