Ayer fueron detenidos Matías y Heriberto Ancalaf, hijos del comunero mapuche y exvocero de la CAM Víctor Ancalaf, por su presunta participación en el crimen del sargento Francisco Benavides, ocurrido en Collipulli en mayo. Víctor Ancalaf también fue aprehendido en flagrancia por el delito de tenencia de municiones: cinco cartuchos calibre 12 y casquillos percutados de escopeta en un frasco.
El Juzgado de Garantía de Collipulli decretó legal el procedimiento en que fueron aprehendidos los comuneros y acogió la solicitud del Ministerio Público de ampliar el plazo de detención hasta las 15.00 horas del viernes 8 de octubre. La Fiscalía espera obtener mayores antecedentes para la formalización de los hermanos.
Hoy, el subsecretario Juan Francisco Galli se refirió a estas detenciones señalando que “da cuenta de un trabajo muy profesional, muy metódico, de los equipos investigativos de Carabineros y de la fiscalía regional de La Araucanía en la macrozona sur”.
El subsecretario afirmó que “con estas detenciones vamos a evitar muchas hechos de violencia probablemente, porque se les están imputando otros cinco hechos de violencia a estos mismos imputados. Es un grupo, una organización, que operaba en la zona y que claramente está vinculada con hechos de violencia en el lugar”.
Galli explicó que la familia Ancalaf estaría involucrada en un caso de secuestro, tortura y asesinato ocurrido en junio.
“Secuestraron a dos individuos de una comunidad cercana, de la comunidad Hue Nehuen, en Collipulli. Los encerraron en una caseta, los torturaron para que confesaran, incluso a uno le desmiembran un dedo y además uno de ellos es asesinado. El otro probablemente hubiera sido asesinado si no hubiera sido porque logra escapar y él es el que da cuenta a la policía y la fiscalía de los hechos. Ahí están involucrados parte de la familia Ancalaf, María Ancalaf Llaupe es la persona que se detuvo en el corte de ruta, que terminó con el fallecimiento de Francisco Benavides. Es la persona que termina siendo la que lideraba la organización que llevó adelante el secuestro con tortura y finalmente con homicidio. Son sus hijos, la pareja de sus hijos”, sostuvo. Ese hecho de secuestro tendría como origen la disputa de armas, dijo Galli.
“Esto no tiene nada que ver con ningún tipo de reivindicación, aquí lo que hay es delincuencia, se le quiere esconder bajo el paragua de reivindicaciones del pueblo mapuche pero en realidad lo que hay es criminalidad organizada”, finalizó el subsecretario.