Fue a las 4.36 de la madruga de este martes cuando tres reos, calificados como "de alta peligrosidad", lograron escapar del penal Colina I. Así lo informó Gendarmería a Carabineros para alertar de la situación, que se suma a una serie de hechos que durante el último tiempo han afectado a la institución penitenciaria, motivando incluso una "limpieza" interna para erradicar posibles malas prácticas.
Según los antecedentes del caso, los reos que escaparon del penal son Pedro Torres González (condenado por homicidio), Eduardo Pavez Peñaloza (condenado por robo con intimidación) y Guillermo Villarroel Orellana (condenado por homicidio). Todos están siendo buscados por personal del OS-9 de Carabineros. Funcionarios de esa unidad llegaron hasta el centro penitenciario para entrevistar a testigos y levantar información de las cámaras de seguridad.
El escape tomó por sorpresa a medio mundo. Cuando la totalidad del penal dormía y los gendarmes no resguardaban la celda de los hoy prófugos, González, Pavez y Villarroel cortaron los barrotes del ventanal que los separaba de la galería que daba al patio. Luego accedieron a uno de los patios, que colinda con el penal Colina II, cortaron la reja del cierre y las mallas de seguridad y finalmente huyeron por la carretera San Martín.
Abren sumario
Tras el incidente, la institución penitenciaria anunció que inició un sumario interno con el objetivo de determinar eventuales responsabilidades administrativas en el caso.
El director regional de Gendarmería, Víctor Fuentes, explicó que "los funcionarios que estaban en las dependencias resguardan el total del establecimiento, que son alrededor de 19 hectáreas, y es motivo de investigación en este momento ver en qué circunstancias ellos (los reos) evadieron la seguridad y si existe algún grado o no de responsabilidad del personal que estaba ejerciendo la vigilancia".
La escapatoria quedó al descubierto cuando en horas de la mañana de este martes se realizaba el conteo rutinario de internos. Al alertar que faltaban tres se activaron todos los protocolos de seguridad y se hizo la denuncia en Carabineros y ante el Ministerio Público.
Con el hecho se concretó la cuarta fuga desde centros penitenciarios en lo que va del año. Las anteriores ocurrieron en los recintos de Alto Hospicio, Quirihue y Colina II. No obstante, la de este martes fue la primera en 2019 en la que se registra un escape masivo.
Si bien los esfuerzos para encontrar a los prófugos han sido intensos, desde Gendarmería explicaron que de todos los reos que escaparon este año ninguno había sido encontrado.
Medidas contra escapes
Entre las acciones preventivas, Gendarmería ha buscado anticiparse a eventuales escapes. El año pasado la entidad carcelaria logró desactivar 650 intentos de fuga desde las 83 cárceles que hay en Chile. De ellas, los presos involucrados solo lograron concretar nueve.
En la institución penitenciaria insistenen que pese a la citada cifra de intentos de escape, ella es menor en comparación con el flujo de internos que ingresa a prisión. Según datos de Gendarmería, el movimiento de ingreso a las cárceles en 2018 llegó a 120.151 internos, por lo que la tasa de fuga llega apenas a 0,07 personas por cada mil ingresadas al sistema carcelario, tanto condenados como imputados.
El OS-9 continúa con las pesquisas en Colina I y, además, se activó un plan para evitar que los reos salgan del territorio nacional.