La postulación de 15 internos de Punta Peuco, condenados por crímenes de Lesa Humanidad entre 1973 y 1990, tuvo sus primeras consecuencias al interior de Gendarmería. A raíz de esta situación, la institución decidió este jueves abrir un sumario al considerar que habían funcionarios que habían actuado de forma irregular dado que estas personas no cumplían con los requisitos contemplados por la Ley.
Entre las personas que podrían haber sido favorecidas, se encontraba Álvaro Corbalán, exjefe operativo de la Central Nacional de Inteligencia (CNI), quien está condenado a más de 100 años de prisión por distintos crímenes.
Tras las primeras horas de investigación, durante la tarde de este viernes, el subdirector operativo de la institución, Pablo Toro, quien hace de fiscal en este sumario, suspendió de sus funciones al alcaide de Punta Peuco, Cristian Albornoz, y al jefe del control penitenciario, Sergio Alarcón. Según fuentes al interior de la institución, tras las primeras indagatorias quedó claro un eventual incumplimiento en la aplicación de la nueva Ley de Libertad Condicional.
La decisión de suspender a ambos funcionarios permanecerá hasta que el fiscal del sumario así lo determine.