"Fuente-Alba habría actuado sirviéndose de su calidad de comandante en jefe, máxima autoridad del Ejército de Chile, sin la cual no habría podido impartir órdenes para el uso de los fondos destinados para gastos reservados". Con este y otros argumentos, la ministra en visita, Romy Rutherford, rechazó la solicitud de incompetencia que el excomandante en jefe del Ejército, general (R) Juan Miguel Fuente-Alba, presentó ante el tribunal militar, resolución que luego fue confirmada por la Corte Marcial.
El exjefe del Ejército entre 2010 y 2014 está procesado por la presunta malversación de más de $ 3.500 millones en gastos reservados en la investigación de Rutherford y, además, fue formalizado por el fiscal José Morales por el delito de lavado de activos, por $ 650 millones.
Fuente-Alba pidió que el caso solo fuera tramitado en el Séptimo Juzgado de Garantía, pues su abogado, Miguel Chávez, argumentó que no se ajusta a la ley que su representado sea investigado en dos sedes judiciales. Además, sostuvo que ambos delitos, la malversación y el lavado de activos, debían ser tramitados solo en un tribunal y que este último ilícito "arrastra" al primero.
En 38 páginas Rutherford desmenuzó el caso Fuente-Alba y explicó por qué debe seguir indagando la causa. En algunos de los puntos de su resolución señaló que no hay una "yuxtaposición" en ambas investigaciones, y que las dos pesquisan delitos distintos, montos distintos y un periodo distinto.
Además, recordó que en 2014 Fuente-Alba pidió ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago solo ser investigado en la Justicia Militar y no en la civil. Esa vez, el tribunal de garantía dijo que ambos delitos debían indagarse en sedes distintas. En ese entonces no estaba Rutherford a cargo del caso y el ministro en visita era Omar Astudillo.
La jueza también señaló que "con los hechos hasta ahora justificados en el proceso como constitutivos de delitos investigados, no puede sino colegirse que aquellos habrían sido perpetrados a partir de las conductas desplegadas dentro de los recintos o dependencias del Ejército". Según el procesamiento, Fuente-Alba usaba dineros en efectivo de gastos reservados para comprar artículos personales para la Comandancia en Jefe y su residencia institucional.
La magistrada también recordó que la Corte Marcial ya había confirmado el rechazo a una solicitud de incidencia declinatoria por la defensa del excomandante en jefe, general (R) Humberto Oviedo. Rutherford indicó que "el procesado Humberto Oviedo se encuentra procesado en los presentes autos como autor del delito reiterado de malversación de caudales públicos (...) por hechos acaecidos en el periodo que fue comandante en jefe del Ejército de Chile. Así, en este punto, la similitud entre la situación y condiciones del señor Oviedo con el incidentista Fuente-Alba son evidentes".
La resolución de Rutherford, confirmada por la Corte Marcial, rechazó "con costas" la solicitud del general (r), tal como lo pidió el Consejo de Defensa del Estado (CDE), "por considerar esta magistrada que el articulista ha carecido de motivos para invocarla, teniendo presente, además de los antecedentes que la justifican, el tiempo que ha transcurrido desde el inicio de esta causa, así como los pronunciamientos pretéritos que existen en todo el tema incluso emanados de otros tribunales y a petición de la misma parte, lo que hace estimar que se trata de un actuar más propiamente dilatorio que provoca un desgaste innecesario, tanto para las partes como el tribunal".
