Tras las denuncias realizadas por un grupo de 120 ciudadanos haitianos residentes en Osorno, quienes el jueves protestaron en el centro de la ciudad, alegando que una empresa de berries de San Pablo no les habría pagado sus sueldos por trabajar durante el verano en la cosecha de arándanos, el gobierno anunció que aumentará la fiscalización de empresas que trabajen con migrantes.
El subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, señaló que "como gobierno hemos estado fuertemente comprometidos con este caso. En Chile no deben haber trabajadores de primera o segunda categoría. Todos sin excepción, ya sean nacionales o extranjeros, deben ser respetados en su dignidad y derechos", afirmó.
Arab agregó que "nuestro Seremi del Trabajo ha estado acompañando a los trabajadores haitianos desde que hicieron la denuncia y ha sido un interlocutor clave en el diálogo con la empresa para que cumpla con lo que legalmente le corresponde, esto es, pagar los sueldos adeudados a dichos trabajadores".
La autoridad además explicó que se instruyó a la Dirección del Trabajo (DT) para que aumente la fiscalización en empresas que trabajen con trabajadores migrantes, "ya que estos muchas veces se encuentran más desprotegidos y pueden ser víctimas de abuso", afirmó el subsecretario.
En total, el año pasado la DT recibió más de 3.400 denuncias de trabajadores por acoso laboral, que incluye discriminación y maltrato psicológico.