Casi dos meses lleva en funcionamiento parcial el puente Cau Cau de Valdivia, en la Región de Los Ríos. El viaducto, que contempló una inversión de $ 18 mil millones, no había podido operar hasta este año por fallas en su construcción e, incluso, el gobierno de Michelle Bachelet había evaluado su demolición. Sin embargo, el 15 de agosto fue abierto por el gobierno con limitaciones, a la espera de conocer el resultado de un informe técnico solicitado por su cartera, el que definiría el futuro de la obra.

Hoy el ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, anunciará que dicha evaluación, realizada por la empresa estadounidense Modjeski and Masters, dio luz verde definitiva al puente, y detallará en la ciudad de Valdivia las distintas reparaciones que permitirán la recuperación definitiva de la obra.

Según trascendió, el análisis concluye que puede ser restaurado, con el objetivo de que sea habilitado para que funcione en la modalidad basculante original. Hasta ahora y por recomendación técnica, solo puede levantar sus tableros dos veces al mes para que puedan pasar embarcaciones bajo él.

Una vez analizado el documento, el MOP informó al Presidente Sebastián Piñera hace unos días. El propio Mandatario abrió el Cau Cau al público y calificó la obra como una de las inversiones más relevantes para la Región de Los Ríos.

Fontaine entregará durante esta mañana el costo y el cronograma de las tareas que se deben realizar para restaurar parte de la estructura, operaciones que serán encargadas a empresas especializadas.

En mayo pasado, el ministro explicó a la comisión de Obras Públicas del Senado cuáles eran las opciones mediante las cuales se podría abordar una eventual restauración de la vía. Según las estimaciones, una inversión abordable sería, por ejemplo, la reparación de los tableros. En cambio, la construcción de un nuevo proyecto hubiese tenido un costo de $ 16 mil 600 millones (US$ 25 millones). Esa no hubiese sido la única complejidad, ya que si el informe internacional hubiese recomendado demoler la obra, la construcción de un nuevo puente habría demandado otros 20 meses de ejecución. Estos cálculos fueron realizados en base a informes encargados por el ministerio a un equipo de trabajo liderado por la Directora General de Obras Públicas, Mariana Concha, pues la iniciativa tiene carácter presidencial.

Leonardo Daneri, ingeniero y presidente de la Asociación de Concesionarios de Infraestructura Pública (Copsa), sostiene que "cualquier proyecto es corregible. Pensamos que la decisión de perseverar en estudios y análisis fue muy positivo, pues así se puede determinar de manera cierta qué hacer. El puente estuvo paralizado cuatro años, un periodo demasiado largo".

Región

El alcalde de Valdivia, Omar Sabat, sostuvo ayer que emplazar un nuevo puente contempla altísimos costos y "un tiempo de espera excesivo para las personas que requieren una forma expedita de moverse por la ciudad".

El jefe comunal añadió que hasta ahora la estructura opera de manera correcta y que cada día pasan cuatro mil vehículos por él. Además considera que también ha dado conectividad no solo a los automovilistas, sino que también a los ciclistas. Añadió que el Cau Cau ha sido abierto dos veces al mes a las embarcaciones, las que no han tenido dificultades en su tránsito. Por ahora, el trayecto por sobre la plataforma se desarrolla con restricciones de peso y altura de los vehículos. Por ejemplo, están excluidos los camiones.

El senador Alfonso De Urresti (PS) agregó que cualquier alternativa para el Cau Cau "nos parece bien. Acá lo importante es que, finalmente, se pueda poner en servicio". El parlamentario añadió que el puente ha tenido como resultado una conectividad "ansiada entre Isla Teja y el centro, lo que permite llegar, por ejemplo, más rápido a la Universidad Austral".

Hoy también los legisladores de la región planean solicitar a Fontaine que se concreten otros puentes en la zona como Cochrane-Los Pelúes, el que es financiado por el ministerio de Vivienda.