Para las 21.00 estaba previsto el acuartelamiento de los más de siete mil funcionarios de Gendarmería encargados de los recintos penales del país. La medida anunciada por las 12 agrupaciones gremiales acompañaría a un paro indefinido que se iniciaría hoy, luego que el gobierno descartara la principal petición de estas organizaciones: sentar al ministro de Justicia, Hernán Larraín, a negociar con los uniformados el petitorio de demandas presentadas el lunes, entre las que destacan cambios a la carrera funcionaria, definiciones legales sobre el sistema de pensiones, mejora en las condiciones de las cárceles y poner fin a la criminalización en contra de los funcionarios (ver secundaria).

Pero el paro no se llegó a concretar. Durante esta madrugada, las autoridades y los dirigentes de Gendarmería alcanzaron un principio de acuerdo que desactivó el paro anunciado por el sector. "Él (ministro Larraín) se comprometió a estar detrás de este proceso. Participa Gendarmería, los gremios y representantes del ministerio", dijo Andres Segovia, dirigente funcionarios Gendarmería.

Segovia dijo que se volverían a reunir con el ministro de Justicia este viernes para comenzar a trabajar los puntos acordados: "Acordamos priorizar los temas y vamos a comenzar inmediatamente este día viernes con los equipos técnicos de Gendarmería de Chile y los funcionarios a trabajar en la carrera funcioanria, que es uno de los temas prioritarios de la institución"

"Nosotros somos conscientes y somos responsables de que acá hay un abandono histórico, y ese abandono no se puede solucionar durante un año, somos responsables en decir eso, pero confiamos en el señor ministro de Justicia", añadió el dirigente.

Larraín, por su parte, sostuvo que dentro de los puntos acordados, "el primero de ellos es estructurar la carrera funcionaria lo más rápido posible".

"Hemos encargado a la directora nacional, Claudia Bendeck que encabece esta mesa de trabajo para dentro de los próximos 90 días se presente en estado de avance", añadió.

Extensa jornada

En los últimos minutos de ayer, y cuando los gremios estaban reunidos para comunicar a la prensa sus medidas, se supo que el propio Larraín junto al subsecretario del ramo, Juan José Ossa, y la directora de Gendarmería, Claudia Bendeck, los recibirían en el ministerio, echando por tierra las palabras de la propia vocera de gobierno cuando el lunes pasado afirmó que el Ejecutivo no cedería a presiones. A la cita de ayer en la noche se sumó la subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Recabarren.

Según fuentes de gobierno, durante la tarde la llamada del presidente de la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (Anef), Carlos Insunza, al Ministerio de Justicia logró aquello que el intercambio de oficios y correos electrónicos no había permitido. El dirigente intervino en la disputa lo que habría servido para que Larraín accediera a sentarse con los dirigentes.

En la cita participaban Patricio Baquedano, presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup); Alberto Figueroa, de la Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios (Anop); Pablo Jaque, de la Asociación de Gendarmes de Chile (Agech); Jorge Pinochet, de la Asociación Nacional de Suboficiales (Ansog), y Juan Carlos Muñoz, de la Asociación de Directivos, Profesionales, Técnicos, Administrativos y Auxiliares (Adipgen).

Las mismas fuentes explicaron que la participación del ministro en esta primera reunión serviría como muestra de confianza para los gendarmes de cara a las negociaciones deberían continuar a cargo de Bendeck. Tras los cuestionamientos que había recibido por su rol la primera mujer al mando de la institución.

Los gendarmes no reconocían su liderazgo, al considerar que una mesa solo con la directora no daría los frutos esperados, y exigían que el secretario de Estado asumiera un rol protagónico.

Acuartelamiento

En horas de la tarde Pablo Jaque, presidente de Agech, se mostró a favor de las negociaciones impulsadas por el Ejecutivo, aunque consideraba que ello debía "ir validado por la primera autoridad, que es el ministro de Justicia y el subsecretario, aunque no nos negamos a que la directora participe de la reunión, pero para que tenga validez debe participar el ministro".

Las diferencias y la falta de reconocimiento hacia Bendeck no surgen solo en esta etapa de la negociación. El 5 de junio se reunieron por última vez los gremios con la autoridad, no obstante, la conversación no culminó luego que los funcionarios descontentos se levantaron y se fueron de la reunión.