Gobierno presenta actualización de la Política Nacional de Convivencia Educativa: contempla proyecto de ley y 42 medidas específicas

Este lunes, el Ministerio de Educación presentó una actualización a la Política Nacional de Convivencia Educativa (PNCE), instrumento parte de las acciones del Plan de Reactivación Educativa que busca atender el impacto que tuvo la pandemia y la falta de clases presenciales, así como también establecer un marco de acción respecto al aprendizaje socioemocional y añadir estrategias de convivencia.

Con más de 20 años de existencia, este el cuarto ajuste que se le realiza al instrumento tras su última actualización el 2019.

Según destacó el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, la actualización fue desarrollada ”en base a un proceso muy largo, muy amplio, de diálogo entre los distintos actores del sistema. Entre 2022 y esta fecha hemos desarrollado múltiples espacios, mesas de trabajo, políticas, técnicas”.

La última de ellas, añadió, fue la mesa de centros educativos como espacios protegidos, un trabajo que desarrollaron intersectorialmente con los Ministerio de Salud, de Desarrollo Social y Familia, Senda, y la Subsecretaría de Prevención del Delito, entre otras instituciones.

“Es decir, una mirada amplia, diversa, compleja, porque sabemos que las dificultades que hoy día viven muchos establecimientos educacionales en materia de convivencia no empiezan ni terminan dentro de la escuela, son fenómenos que afectan a la sociedad en su conjunto, y por lo tanto podemos decir que el desafío de mejorar en convivencia escolar, con todas las herramientas y los apoyos que el sistema escolar pone y el Ministerio de Educación trabaja, es un desafío de todos y todas”.

Sobre su contenido, la subsecretaria de Educación, Alejandra Arratia, detalló que esta política se compone de tres grandes líneas de trabajo: un documento central, que es el marco orientador de la política; un Plan de Acción 2024-2030 que contempla 5 grandes dimensiones que se plasman en 26 subcategorías y 42 medidas específicas para apoyar la concreción de esta política; y 12 cartillas con diversos temas y estrategias específicas para abordar distintos ámbitos del desarrollo del trabajo en la convivencia educativa y que serán enviadas gradualmente en las próximas semanas a los establecimientos

Dentro del Plan de Acción se considera el compromiso de presentar un proyecto de ley que fortalezca la convivencia escolar; diseñar e implementar cursos o programas de formación continua para directivos, docentes y asistentes de la educación respecto de aprendizaje socioemocional y gestión de conflictos; usar las pruebas Simce para monitorear el estado de la convivencia escolar en las escuelas; generación de bases de datos para contar con mejor información; y el despliegue de campañas comunicacionales.

Consultado sobre cómo este instrumento podría ayudar en los casos de violencia escolar, el ministro sostuvo que lo primero que buscan es dotar de herramientas al sistema y que tenga así la capacidad de comprender cuál es el fenómeno frente a los cual está hoy presentes.

“Porque no son los mismos que ocurrían antes del 2019, por lo tanto, lo primero es que queremos tener una aproximación actualizada a los tipos de problemáticas que surgen todos los días en el ámbito escolar, y que esto tenga una correlación directa precisamente en las capacidades que tiene el conjunto de la comunidad educativa para responder a esas problemáticas”; afirmó. “Naturalmente esto es un proceso que no es automático, toma tiempo”.

“Muchos de estos temas también están asociados a cambios culturales, porque como decía recién, si asumimos que la convivencia es un aprendizaje, el aprendizaje es algo que cuesta enraizar en las dinámicas cotidianas de nuestros actores de la comunidad educativa”, afirmó. “Yo creo que acá hay un desafío mayor -y quiero volver a insistir en eso- y ese desafío mayor es que este es un problema de la sociedad en su conjunto”.

“La tarea de la convivencia escolar no es una tarea solo de las comunidades educativas, es una tarea de todo el país”, concluyó.

1. La convivencia se enseña y se aprende: vinculación de la convivencia con los instrumentos curriculares
2. Iniciando en familia el camino de la convivencia
3. A convivir se aprende desde la primera infancia. La convivencia y la ciudadanía desde la educación inicial
4. A convivir se aprende a lo largo de toda la vida. Convivencia educativa en la Educación de Personas Jóvenes y Adultas (EPJA)
5. Convivencia educativa en escuelas rurales multigrado
6. Aprender a convivir con justicia, en democracia y en paz: resolución dialogada y pacífica de conflictos
7. Convivencia inclusiva: elementos movilizadores para la reflexión y la acción
8. ¿Cómo una educación no sexista favorece la convivencia educativa?
9. Del episodio a la situación: gestionando la convivencia educativa desde la reflexión y el análisis
10. ¿Cómo prevenir y abordar la violencia en la comunidad educativa?
11. Conformando y gestionando el equipo de convivencia educativa
12. Gestión de redes territoriales para la transformación continua de la convivencia educativa