Junto con categóricas advertencias al sector farmacéutico comercial en Chile, el Presidente Sebastián Piñera presentó este lunes la nueva Política Nacional de Medicamentos, dotada con 30 medidas que apuntan, según el gobierno, a disminuir el alto costo para los usuarios que implica la adquisición de fármacos en el país.
Y los antecedentes en este ámbito no faltan: un estudio dado a conocer por el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) detectó que existen diferencias de hasta $ 181 mil entre medicamentos "de marca" y sus bioequivalentes de menor precio.
"Los remedios en Chile son caros, demasiado caros, y eso tiene que cambiar. Aquí es claro que hay responsabilidad de los laboratorios, que a veces cobran más en Chile que en otros países, y una clara responsabilidad de las farmacias, que muchas veces no cumplen la ley", afirmó el Mandatario.
Entre la batería de disposiciones figura el anuncio de instalación de almacenes farmacéuticos en todas las comunas que hoy no cuentan con farmacias. Otra medida consiste en el despacho a domicilio en favor de pacientes con dependencia severa en diez comunas del país.
Uno de los aspectos centrales de esta nueva política reside en promover los bioequivalentes. Así, se aumentará el número de principios activos con bioequivalencia en 200 productos farmacéuticos, junto con una campaña de educación a la población para que adquiera estos productos. Los establecimientos comerciales del rubro deberán disponer de un petitorio mínimo de remedios bioequivalentes por principio activo, para garantizar que exista adecuada oferta de estos compuestos.
"Se va a exigir a las farmacias tener un stock mínimo suficiente de medicamentos bioequivalentes, y las que no lo cumplan más vale que lo piensen diez veces, porque el castigo va a ser muy severo. No vamos a permitir que a través de distintos subterfugios sigan abusando de las personas", expresó el Presidente.
Sobre este punto, la directora del Instituto de Salud Pública (ISP), María Soledad Velásquez, advirtió que "vamos a ejercer nuestro más enérgico castigo a todos aquellos centros farmacéuticos que no cuenten con los bioequivalentes que exige la ley. Aplicaremos las máximas sanciones, incluyendo la clausura y cese de autorización de las farmacias, en caso necesario".
El senador Guido Girardi (PPD) destacó que "casi todos los temas que planteó el Presidente son artículos del proyecto de Ley de Fármacos II, que ha estado retenido durante dos años en la Cámara de Diputados por los intereses económicos. Es por eso que valoro lo que está haciendo el gobierno y vamos a trabajar codo a codo con el ministro de Salud".
Venta electrónica
Entre las 30 medidas figura también la elaboración de un reglamento para la venta electrónica de medicamentos, área sobre la cual hoy prácticamente no existe regulación.
En otro punto, las farmacias comunales reciben un espaldarazo, pues se favorecerá su instalación y desarrollo, incluyendo las comunas que actualmente no cuentan con farmacias comerciales.
Asimismo, se pondrá énfasis en la actualización de las canastas de medicamentos de las patologías Auge y de la Ley Ricarte Soto, y las autoridades incluyeron en el listado la suma urgencia al proyecto de Ley de Fármacos II.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, explicó que la gran mayoría de estas medidas tiene carácter administrativo y "no requieren de una ley para implementarse". Agregó que varias de las iniciativas son de aplicación inmediata y otras requieren un plazo más extenso.
Apoyo con alcances
Una de las disposiciones anunciadas que ya generó discusión este lunes es la que permitirá a personas naturales la importación directa de medicamentos de uso individual, a través de una autorización específica del ISP.
Marta Diez, presidenta de la Cámara de la Innovación Farmacéutica, señaló que como gremio apoyan las iniciativas que buscan disminuir el gasto de bolsillo de las personas en fármacos, "siempre y cuando la oferta de medicamentos sea segura y de calidad".
No obstante, consideró que la medida relacionada con la importación directa "sería positiva mientras sea excepcional. Ya existía la legislación para casos donde los medicamentos no están disponibles en el país o para situaciones de emergencia. Sin embargo, se debe mantener como medida excepcional mientras el producto no esté disponible en el país".
En tanto, la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos (Asilfa) valoró que muchas de las medidas "van en la dirección correcta" y apoyó "la mayor fiscalización a las farmacias".
El gremio sí mostró reservas ante otra de las iniciativas: el fraccionamiento de medicamentos, que consideró actualmente "impracticable, pues la industria local no tiene la estructura ni el personal técnico para garantizar la trazabilidad".
Victoria Beaumont, directora de la Fundación Politopedia, señaló que se trata, en general, de medidas aprobadas en la Ley de Fármacos I pero que no han sido implementadas en su totalidad, o discutidas en Fármacos II. "Aún quedarían pendientes soluciones de apoyo al pago de bolsillo del cotizante de isapres o particulares para medicamentos éticos, que no tienen una modalidad de cobertura específica, como el GES o Ricarte Soto", aseveró.