"Quiero agradecer a Dios por estos veintidós años en que hemos tratado juntos de servir al Señor y anunciar la alegría del Evangelio en esta querida tierra maulina. Hemos compartido tantos gozos  y  dolores buscando hacer visible y cercano el rostro misericordioso de Dios".

Con estas palabras, emitidas mediante una carta de despedida dirigida a la comunidad de Talca, Horacio Valenzuela, se refirió a la decisión del Papa Francisco de aceptar su renuncia como obispo de la diócesis local.

Agregó que "las heridas que de una u otra manera, con palabras, obras y omisiones hemos provocado al cuerpo de Cristo que es la Iglesia la han debilitado. No pocos reciben con perplejidad las noticias que día a día muestran un dolor nuevo. Son días de prueba donde, como Santo Pueblo de Dios, necesitamos orar más intensamente y comprometernos a colaborar cuidando la unidad. Si escuchamos juntos las palabras que nos dice el Señor sabremos discernir su voluntad en los acontecimientos mirándolos con realismo y esperanza".

Valenzuela era uno de los obispos cuestionados al interior de la Iglesia, ya que fue formado por el expárroco de El Bosque, Fernando Karadima. Tras conocerse la noticia de que el Papa aceptaba su renuncia al cargo, el ahora obispo emérito, dejó Talca.

En su adiós, el prelado, pidió disculpas a la comunidad por los errores que pudo haber cometido durante su período a cargo de la diócesis.

"Quisiera sincera y humildemente a todos pedirles que me puedan perdonar tantas deficiencias y limitaciones que el Señor conoce. Les pido también perdón a quienes causé algún sufrimiento y no traté bien; a quienes presté poca atención y no les di un buen testimonio de Cristo y su Evangelio;   por todo lo que no concluí, por lo que no hice o hice mal, les pido su perdón y comprensión", indicó.

Finalizó su carta pidiendo a la virgen María que ayude a la comunidad "a seguir cultivando el amor a Cristo y a su Iglesia. A ella le pido también que cubra con su amor de Madre a Mons. Galo Fernández quien desde ahora acompañará a esta querida Iglesia en su caminar hacia Cristo".

"Les saludo con inmensa gratitud y pido al Señor les llene de bendiciones a todos. Les pido por favor que recen por mí", concluyó.