Amidson Prudo (23) fue subido en una silla de ruedas al avión de la Fuerza Aérea de Chile que viajó el pasado 26 de noviembre a Puerto Príncipe, en el marco del Plan Retorno del gobierno que favoreció a los isleños decididos a regresar voluntariamente a su país natal. Sin embargo, detrás de esa escena había una historia desoladora: el joven quedó en esa condición luego de que intentó suicidarse hace un año, después de recibir la noticia de la muerte de su madre en Haití.
Prudo estuvo casi un año en rehabilitación en el Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak, en Independencia. Su caso no es el único: las atenciones psiquiátricas de extranjeros que han llegado a este lugar han aumentado 110% desde 2016, lo que equivale a de 60 a 126 hospitalizaciones por año (ver infografía).
La subdirectora médica de la entidad, Lilian San Román, explica que la preocupación por la salud de las personas que migran es un asunto global. "Es la migración en todas partes del mundo la que está sometida a una situación de trauma, de dolor, de pérdida. Todo lo que dejaste y lo que perdiste es lo que hace a los migrantes mucho más vulnerables a la presentación de patologías de salud mental".
Solange Fuentes, trabajadora social y encargada del programa de migrantes del hospital, indica que los extranjeros que llegan al recinto presentan, además, escasas redes de apoyo y precarias condiciones de vida: "Hay una serie de factores sociales que influyen en su estado emocional y clínico", asegura. "Por lo general, los pacientes llegan sin previsión, no tienen RUN y sus condiciones migratorias no están regularizadas".
Fuentes agrega que también hay diferencias en cómo entienden el concepto de enfermedad y salud. "Llegan a través de urgencia cuando están muy mal, pero la prevención no es algo que culturalmente tengan tan incorporado", precisa.
Desde 2016, el Servicio de Salud Metropolitano Norte de Santiago tiene una mesa de trabajo de migrantes. Vianny Barrera, coordinadora del programa de Salud, explica que en la zona metropolitana norte "tenemos al inmigrante pobre, que vive en hacinamiento, que no tiene tiempo para ir a atención primaria y que desconoce los derechos y decretos a los que se puede acoger".
Consulta al espíritu
Uno de los casos que más recuerdan los funcionarios es el de un ciudadano haitiano de 24 años que ingresó por un aparente intento de suicidio en 2016. En el sector de hospitalización, que cuenta con patio y árboles altos, el isleño se subió a uno. Llegaron carabineros y bomberos, mientras un facilitador cultural intentaba comunicarse por megáfono con él. Un par de horas después, bajó de improviso. ¿Qué había pasado? Él practicaba la religión vudú y le había pedido a su espíritu protector un deseo. Para poder comunicarse con él, debía subir a un árbol.
"Ha sido un gran desafío para el equipo clínico, porque está el aspecto cultural, que también influye en la lectura de la sintomatología del cuadro que presenta el paciente", explica la trabajadora social. Por ello, han realizado cursos de creole a los funcionarios y jornadas de reflexión, y han involucrado a los facilitadores, a los que piden que traduzcan de la manera más exacta posible, poniendo énfasis en la forma en que los pacientes dicen las cosas.
Las atenciones de extranjeros de los últimos dos años en el Dr. José Horwitz Barak se han centrado mayoritariamente en personas provenientes de Latinoamérica, de entre 21 y 29 años, y cuyos principales diagnósticos han sido trastornos psicóticos, esquizofrenia y trastorno afectivo bipolar. Un 40% de los casos son pacientes de nacionalidad haitiana.
San Román explica que los haitianos vienen de una cultura y un idioma diferente, y esa "es una barrera enorme y generadora de mucha ansiedad. Adaptarse para ellos no ha sido fácil y tampoco para el país. Están mucho más exigidos en términos tensionales y ambientales que el resto de la migración latinoamericana". Y según su experiencia, la psiquiatra cree que a la sociedad chilena le hace falta "tener una mayor acogida a nuestros migrantes", que tome en cuenta sus necesidades en distintos ámbitos, entre ellos el de la salud.