El lunes 6 de agosto, el director de Inteligencia de Carabineros, general Ignacio Villarubia, expuso ante la comisión investigadora del caso Huracán para dar cuenta del impacto que la causa ha tenido en este departamento, y descartó tener un mayor conocimiento de cómo se originaron las presuntas pruebas falsas en la investigación por atentados incendiarios en La Araucanía.

Sin embargo, tres días después Villarubia se enfrentó nuevamente a Huracán. Así lo aseguraron fuentes de Carabineros, quienes señalaron que el jueves 9 de agosto, el fiscal que investiga la eventual falsificación de pruebas, Carlos Palma, en conjunto con la PDI, llegó hasta la Dirección de Inteligencia (Dipolcar) para llevarse 36 computadores de la unidad policial.

El objetivo de la diligencia, aseguraron las mismas fuentes consultadas, era buscar evidencia sobre el presunto conocimiento que el exjefe de Inteligencia, el general (R) Gonzalo Blu, tenía sobre la falsedad del programa "Antorcha".

Esta evidencia estaría contenida en un documento que data de marzo de 2017 y, según trascendió, Villarubia tendría conocimiento de este escrito y no lo habría entregado de manera voluntaria. Es por ello que se cree, al interior de la huestes policiales, que la fiscalía podría indagar esta situación.

Además, consultadas distintas fuentes de la institución uniformada, no habría conformidad por parte del Alto Mando con el trabajo de Villarubia, pues no tendría manejo interno del departamento. Incluso, otras fuentes internas señalaron que ante la posibilidad de que sea removido del cargo, la plaza podría ser ocupada con una persona de confianza del general director Hermes Soto.

Consultado Carabineros, señalaron que "la institución no puede referirse respecto de un proceso de investigación en curso, ya que este se encuentra actualmente judicializado".