La ministra del Interior, Carolina Tohá, entregó este miércoles un nuevo balance respecto a la situación de los incendios forestales que afectan desde la semana pasada a la zona centro sur del país.
Según indicó la jefa de gabinete -tras encabezar una nueva reunión de Comité Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (COGRID)-, en total hay 311 siniestros a nivel nacional, dos más que el martes. De esos, “180 se encuentran controlados, y 84 en combate”.
En cuanto a los daños que han causado los siniestros, la autoridad detalló que hasta ahora se registran un total de 1.180 viviendas destruidas, 5.569 personas damnificadas, 889 personas albergadas y se han realizado 2.180 atenciones de salud.
La ministra informó también que hay 24 fallecidos. El martes se había hablado de 26 decesos. Al respecto, Tohá explicó que la diferencia se debe a que se corrigió la información entregada en la víspera, cuando se había contado dos veces una cifra. “Al día siguiente se dio el aviso que eran dos personas y eran las mismas que el día anterior”, afirmó.
Sobre la superficie afectada, la cifra ronda las 300 mil hectáreas.
“Ya asociado a este evento (la superficie afectada), un poco más de 240 mil hectáreas, por ahí, porque antes del evento recordemos que tenía 60 mil, ya vamos en 300 mil hectáreas”, expresó Christian Little, director ejecutivo de Conaf, quien detalló que “aproximadamente el 60% de esta superficie que es dañada en este evento correspondería a plantaciones, un 30% de bosque nativo y el resto de la superficie, de las 200 mil, sería uso agropecuario de distinto uso”.
Maule “pronóstico complejo”
Respecto a la situación de los siniestros en la Región del Maule, Tohá sostuvo que “la principal preocupación está en el incendio que viene desde la Región de Ñuble, el incendio de Casablanca que ya pasó la frontera de la región. Ahí hay un esfuerzo muy grande para que no se extienda, especialmente (que) no llegue a zonas pobladas donde pueda afectar personas”.
“Maule es una de las regiones que tiene pronósticos complejos en las próximas horas. Se ha hecho un esfuerzo muy grande y hay desplegada una ministra enlace, la ministra (de la Mujer y Equidad de Género, Antonia) Orellana para evitar que tengamos una extensión de los incendios existentes”, expuso la jefa de gabinete.
En el caso de Ñuble, explicó que a pesar de que la dinámica del incendio fue muy compleja el martes, “hay una buena resistencia de los servicios básicos que están funcionando, no ha habido incremento de los delitos, está desplegándose apoyo humanitario muy significativo y también apoyo a la alimentación y traslado de animales”.
“Tuvimos 7 evacuaciones preventivas, especialmente está preocupando el incendio de Quillón, donde hay zonas pobladas que pueden ser afectadas”, puntualizó.
En lo relativo a la Región de Biobío, la máxima autoridad de Interior informó que, junto con el incendio de Santa Ana, se ha vuelto especialmente preocupante “la situación en la comuna de Hualqui, donde el parque nacional Nonguén está amenazado”. Esto, debido a que en el entorno “hay varias zonas con presencia de viviendas, que está hoy día concentrando mucha atención. Hay varias zonas en la región de Biobío que estas sin servicio eléctrico, se está haciendo un trabajo para recuperar esos servicios”.
En Biobío siguen siendo una de las principales inquietudes los incendios de Lumaco y Purén, como han sido la tónica de los últimos días. “El principal foco de preocupación y trabajo está para evitar que el incendio llegue a Capitán Pastene. Se han estado haciendo una serie de acciones en el lugar para preparar a la población ante la posibilidad de que tenga que hacerse una evacuación, pero se va a hacer todo lo posible porque ello no llegue a suceder”, añadió Tohá.