Pasadas las 18:00 horas del primero de diciembre, llegó a Chile el exmilitar Pedro Barrientos acusado del asesinato durante la dictadura del cantautor nacional Víctor Jara y Littre Quiroga, director de prisiones del gobierno del expresidente Salvador Allende.
El acusado fue trasladado en helicóptero al Batallón de Policía Militar de Peñalolén, donde fue notificado por el ministro de la Corte de Apelaciones Guillermo de la Barra del procesamiento en su contra por su participación como autor de homicidios calificados y secuestros simples.
Tras ser notificado, se ordenó que Barrientos permanezca en prisión preventiva e incomunicado en el Batallón de Policía Militar de Peñalolén, a la espera de las diligencias para esclarecer su participación en los asesinatos.
Barrientos estaba viviendo en Estados Unidos cuando se revocó su ciudadanía estadounidense en base a una denuncia presentada por la Oficina de Litigios de Inmigración del Departamento de Justicia. Según el tribunal, el acusado ocultó información de su historial militar en Chile para obtener su permanencia en el país.
Al perder la ciudadanía, las policías comenzaron la coordinación internacional para su deportación.
La embajadora de Estados Unidos en Chile, Bernadette Meehan, mediante su cuenta de X, señaló que “hoy, Pedro Barrientos fue expulsado de los Estados Unidos hacia Chile, donde es buscado por cargos de tortura y ejecución de ciudadanos chilenos, incluido Víctor Jara en 1973. Esto ocurre luego de una investigación de una década, que condujo a la revocación de la ciudadanía de Barrientos a principios de este año. Este caso es un recordatorio del compromiso del gobierno de perseguir a los violadores de derechos humanos que buscan refugio de la justicia en los Estados Unidos”.
