"El saldo migratorio, que es la diferencia entre la inmigración y la emigración, presenta un crecimiento exponencial para el período 2012-2018. Luego se proyecta una disminución acelerada hasta 2022, para luego estabilizarse en torno a los 11.000 migrantes en los años siguientes".
Con esta cifra, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) analiza este miércoles en sus estimaciones y proyecciones de la población de Chile hasta 2050 -realizadas a partir de las cifras del Censo 2017- el fenómeno de la migración hacia nuestro país, planteando una tesis: que si bien el aumento en los últimos años ha sido muy por sobre cualquier tasa previa, habrá una contracción a partir de 2020 y luego se volverá a cifras similares a las que existían previamente.
Según la tabla publicada por el INE, hasta 2005 la cifra de migrantes nunca superó la cifra de 1 por cada mil personas. Entre ese año y 2014, los números oscilaron entre 1 y 2 por cada mil personas al año.
Y es desde ese año cuando se da el aumento explosivo. En 2015, llega a 3,10 por cada mil personas; al año siguiente, se duplica alcanzando 6,96. En 2017, en tanto, el número alcanza por primera vez dos dígitos (11,66 por cada mil), tendencia que, según las proyecciones, se mantendría en 2018 (12,66) y 2019 (12,05).
A partir de 2020, siempre según el INE, comenzaría el descenso, pasando a 5,06 por cada mil personas en ese año, 1,54 en 2021 y 0,78 en 2022.
La proyección culmina estabilizando, desde 2024 en adelante, todas las cifras entre 0,5 y 0,6 migrantes por cada mil personas.