Las calles están llenas de agua y barro. Al menos 15 carros de bomberos atochan la zona. "Sentimos irritación en los ojos y garganta. Un poco de dolor de cabeza también", indican los vecinos. A metros de allí, un incendio de magnitud afectaba hoy a un acopio de más de tres mil neumáticos, provocando una columna de humo que llegó al menos a los 900 metros de altura -tres veces la altura de la torre Costanera Center-, siendo visible desde diversas comunas del sector norponiente de la Región Metropolitana.

El fuego comenzó a eso de las 10.30 horas. Vecinos del sector habían iniciado en la madrugada una protesta en contra de una planta de áridos ubicada en la zona.

La alcaldesa de Maipú, Cathy Barriga, apuntó contra la protesta: "Había una manifestación clara. Se recibió la alarma de una manifestación pequeña con la quema de cuatro neumáticos. Saltó el fuego a un pastizal y, lamentablemente, tenemos graves consecuencias".

Los vecinos dijeron que estaban a gran distancia del lugar. Así pasó el día, entre culpas y excusas. Mientras, decenas de voluntarios intentaban apagar el fuego. Una tarea que hasta el cierre de esta edición aún no era posible.

De acuerdo a Analía Neira, de la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medio Ambiente (Bidema), de la PDI, "se ha levantado información referente a que pudo haber intervención de terceras personas".

La intendenta Metropolitana, Karla Rubilar, adelantó que se tomarán acciones legales "si es que hubiera algún indicio de que esto pudiera ser intencional".

La seremi de Salud, Rosa Oyarce, advirtió el inicio de un sumario por el incendio y su situación irregular, dado que "la empresa recicladora de neumáticos incendiada no tiene los permisos sanitarios correspondientes".

Nube tóxica

El uso de neumáticos en las protestas no es azaroso. No basta agua para apagarlos y la emisión de humo es constante. "El material no se puede apagar simplemente con agua, por eso nos apoyamos con espuma. No está avanzando, pero tiene que hacer combustión", señaló el comandante del Cuerpo de Bomberos de Maipú, Ricardo Becerra.

A raíz de esta situación se solicitó el apoyo de un camión de espuma de alta expansión que opera en el aeropuerto de Santiago. Además, se requirió la evacuación en un radio de 500 metros.

La seremi Oyarce aseguró que dada la altura que alcanzó el humo, no provocó riesgo para la salud. "El humo no llega al nivel de la gente ni de las casas", indicó.

Ante un posible desplazamiento de la nube hacia las zonas más pobladas de la Región Metropolitana, el director regional de la Onemi, Miguel Muñoz, indicó que "los servicios de salud de las comunas más cercanas que podrían verse afectadas no han informado de ningún aumento en las consultas broncorrespiratorias".

Laura Borgel, toxicóloga y académica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, indicó que el incendio liberó varios componentes propios del neumático, como monóxido de carbono y metales pesados, además de elementos provenientes del caucho, como el silicio. En el caso de estos últimos, aseguró que las personas deben exponerse en gran medida al humo para que repercuta en su salud. Lo que era muy difícil en esta situación. No así en el caso del monóxido de carbono, en cuyos síntomas destacan la cefalea, la irritación, la agudización de asma y rinitis, entre otros. En tanto, aseguró que los metales pesados se distribuirán por la ciudad, dado que son transportados por el material particulado.

"Una lluvia ayudaría a limpiar. Porque la nube va caminando en altura. Desde las tres de la tarde se mueven desde mar a cordillera, por lo tanto, afectará distintos sectores de la ciudad".