Engaño, violación a los derechos humanos y falta de consecuencia. Esas son algunas de las críticas que ha recibido el gobierno por la compleja situación en Chacalluta, luego de que más de 300 venezolanos llegaran hasta el paso fronterizo para intentar cruzar a Chile desde Perú, sin la documentación necesaria.
La falta de los papeles adecuados ha generado largas filas en la frontera y la acumulación de personas que -durmiendo a la intemperie- se encuentran esperando alguna solución para regularizar su situación migratoria y poder hacer ingreso al país. Fue de hecho, la representante de Juan Guaidó en Chile, Guarequena Gutiérrez, quien -desde la zona- solicitó que se flexibilicen los requisitos de ingreso para los venezolanos.
En conversación con La Tercera, el jefe del Departamento de Extranjería y Migración del Ministerio del Interior, Álvaro Bellolio, respondió a los cuestionamientos y señaló que no quieren repetir el caso de los haitianos que en 2016 entraron a Chile con visas de turismo y se encontraron con un escenario difícil para su permanencia.
¿Cuál es la situación que se está viviendo en Chacalluta actualmente?
La información que teníamos es que cerca de 300 personas estaban en Chacalluta. Estas personas no han hecho un ingreso efectivo a Chile, por lo tanto siguen estando bajo el cuidado administrativo de Perú, nosotros estamos disponiendo de buses para que puedan hacer sus trámites en el consulado en Tacna.
¿Qué le parecen las críticas que han recibido en los últimos días por las gestiones del gobierno en la frontera?
Yo creo que hay varias cosas. Primero, que estos son ciudadanos que efectivamente están en Perú, un país democrático, que respeta los derechos de los venezolanos, donde no los persiguen políticamente, y cualquier declaración que cuestione eso, desde nuestra perspectiva, es compleja, porque estarían cuestionando las credenciales democráticas de un país como Perú. Dicho eso, efectivamente estamos haciendo todo lo que podamos para tener una infraestructura adecuada, pusimos buses de acercamiento, tenemos estaciones de hidratación, duplicamos la cantidad de personas para resolver los casos. Y nos parece que banalizar las solicitudes de refugio o justamente buscar que todas las personas que no tengan su documentación pasen igual a Chile y no hacerse cargo de ellos una vez que estén dentro, en la práctica, es replicar lo que ocurrió el año 2016 o 2017 con los ciudadanos haitianos.
Hay varios venezolanos que ya cuentan con redes en Chile como familiares...
Cuando se ven solicitudes de visa, ya sea para independientes como de reunificación familiar y otros, también es interesante entender que estas personas no vienen con ánimo de turismo. Por lo tanto, si ellos hubieran seguido con la metodología que apoyan estas organizaciones que apoyan la irregularidad, serían personas que no sincerarían su real razón por la que vienen a Chile y que además, su inclusión al país, el acceso a servicios, se dificulta. Nosotros lo único que pedimos, dado que están en Perú, un país que respeta sus derechos, es que hagan estos trámites en el consultado en Tacna, para que tengan su carnet de identidad desde el día uno. Todos sabemos que cuando las personas llegan a Chile con su rut desde el día uno, se facilita el acceso al mercado laboral, vivienda, salud, educación, etc. Eso es lo que buscamos. Si estas personas ya tienen familiares acá, nuestra pregunta es ¿por qué no lo solicitaron de forma consular? ¿por qué querían decir que eran turistas cuando todo el mundo sabe que no lo eran?
¿Cuántas personas intentaron ingresar diciendo que eran turistas?
Todos en primera instancia intentaron ingresar como turistas y cuando nosotros dijimos que no estaban las condiciones, algunos se acercaron y dijeron que en la realidad no era su intención de turismo, sino de residencia. Nosotros llamaos a una política responsable para proteger los derechos de los migrantes. Encontramos que es irresponsable lo que hacen algunas organizaciones que los llaman a entrar de forma irregular sin documentación, porque saben que va pasar lo que pasó con los ciudadanos haitianos, que van a quedar botados con muchas dificultades para regularizar su situación. En el caso por ejemplo de los menores de edad: si un menor de edad no tiene cómo documentar su vínculo con sus padres, lo que nos dice la ley es que tenemos que ponerlo a disposición de los tribunales de familia, para que después pase al Sename y que el Registro Civil confirme la identidad. O sea, ¿estas instituciones nos están pidiendo que hagamos entrar a ciudadanos venezolanos de forma irregular, sin documentos, para llevar a sus hijos al Sename? Encontramos que eso es muy complejo.
¿Entonces consideran que están teniendo una respuesta efectiva a la problemática en Chacalluta?
Duplicamos el personal que está atendiendo, estamos apoyando a los consulados, hemos puesto doctores, buses, tratamos de hablar con la gente. Hemos visto una campaña muy fuerte de algunas organizaciones tratando de incentivar para volver a tener lo que pasó con los ciudadanos haitianos, para volver a tener un país con procesos desordenas, irregularidades, donde una vez que entrar a Chile nadie se preocupa por ellos. Creemos que la respuesta que hemos dado, es una propuesta que apunta a la regularidad, a darles certezas.
¿Se está considerando dar más flexibilidad a los requisitos de ingreso, como lo solicitó Guarequena Gutiérrez por ejemplo?
En la comunidad venezolana ya hay bastante flexibilidad. Tienen una visa solo para ellos, la Visa de Responsabilidad Democrática con bajos requerimientos para ellos. Les aceptamos, además, los pasaportes vencidos con dos años de antigüedad, tienen transporte desde la frontera hacia los consulados. Yo creo que todas estas medidas son las suficientes para que los venezolanos puedan regularizar su situación y desarrollar su proyecto de vida en Chile.